Céntrico y agradable

Recorriendo las bonitas calles de Bayona se nos echó encima la hora de comer en Francia, y tirando de "la innombrable" como recurso de emergencia dimos con este pequeño restaurante, bien situado al lado del río y a escasos 100 metros del Mercado. Eran las dos menos veinte, y por fortuna pudimos hacernos con la única mesa que les quedaba libre, una alta al lado de la puerta. En el comedor habŕa espacio para unos 30 comensales, y fuera disponen de una terraza cubierta que dará cabida a otros tantos seguramente. Mesas y sillas de madera en estilo tradicional, mantelitos individuales de papel y vajilla y cubertería aceptables.

La carta no es muy amplia, y dará cabida a media docena de primeros y una de segundos, en su mayoría platos típicos franceses con algún toque más moderno. Elegimos como primero para compartir unos chipirones a la plancha, una ración abundante y no por su sencillez menos apetecible. Para el segundo mi pareja se decantó por un risotto de gambas aromatizado con trufa y teja de parmesano. Buena presentación y bien resuelto, ningún pero. Yo me decanté por un filete de San Pedro con raviolis de espárragos y crema de marisco. Buen género, los raviolis caseros y con un delicioso y abundante relleno.

Como postre nos quedamos con el Moelleux de chocolate 70% con helado de vainilla, que mereció los 10 minutos de espera que les lleva el prepararlo. En su punto, levemente crujiente por fuera y líquido y cremoso por dentro. Un par de cafés completaron la comida.

En cuanto a los vinos, en la carta habrá del orden de 50 referencias, con una presencia española importante, pues supondrá del orden de un tercio de la carta. Dado mi escaso conocimiento de vinos franceses, nos dejamos aconsejar por el camarero que nos atendió y optamos por un Domaine de la Verpaille Harmonie 2016, un Borgoña que me pareció interesante. En carta estaba por 18€, que por lo que veo por internet es una inflación muy razonable. El servicio consistió en descorche y prueba, y proporcionaron un enfriador para mantenerlo a la temperatura correcta.

El servicio fue atento y amable, y en cuanto vieron que hablábamos español nos asignaron al camarero que mejor lo chapurreaba para que la comunicación fuera más fluida. En resumen, sin ser algo extraordinario es una opción muy correcta para una comida informal en Bayona.

  • Coulant de chocolate

    Coulant de chocolate

  • San Pedro con raviolis de espárragos

    San Pedro con raviolis de espárragos

  • Risotto de gambas

    Risotto de gambas

  • Chipirones a la plancha

    Chipirones a la plancha

  • Vino y logo

    Vino y logo

  • Coulant de chocolate

    Coulant de chocolate

  • San Pedro con raviolis de espárragos

    San Pedro con raviolis de espárragos

  • Risotto de gambas

    Risotto de gambas

  • Chipirones a la plancha

    Chipirones a la plancha

  • Vino y logo

    Vino y logo

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