Buena cena muy agradable

Aconsejados por el amigo Pau de Korpilombolo, la ultima noche de nuestra estancia en la escala nos dirigimos, tras haber reservado el día anterior, al restaurante-coctelería- vermouths-tapas-música de jazz, UM (Ultramar), el restaurante a la moda en l'Escala.

Este nuevo local está ubicado en la punta mas extrema de la ciudad, como si se tratase de la proa de un barco, y desde su restaurante, en el primer piso, se divisan unas vistas maravillosas a 180° sobre todo el litoral adyacente. En la planta baja, se encuentra la coctelería, el bar de tapas, un pequeño escenario para las actuaciones en directo de música de jazz principalmente y una terraza exterior que envuelve todo el perímetro del local. En el primer piso se encuentra el restaurante, decorado como el resto del local en un estilo... como definirlo, post-moderno, industrial, in con un toque ultramarino, con mobiliario de recuperación, en el que te sientes a gusto, al menos esa fue la sensación que tuvimos nosotros.
Las mesas están bien separadas las unas de las otras, muy grandes, desnudas, con sets de mesa circulares de tipo esparto, buena vajilla, buenos cubiertos, cuchillos Pallarés con su logo, servilletas de tela, buenas copas y otros muchos detalles, que seria difícil de definir aquí, sobre la mesa.
El servicio de sala está dirigido por el propietario y alma del restaurante, Gerard Argemí, antiguo socio fundador de Mas Sorrer de Gualta, quien se encargó de nosotros durante toda la cena, ayudado por una camarera y el que supongo que era el sumiller. Servicio muy bueno, amable y simpático en un ambiente totalmente distendido. La carta de vinos es muy corta, 12 tintos y 10 blancos(sin crianza)y el servicio se ciñe al descorche, primera degustación y algún que otro llenado.

La carta del restaurante está dividida en platos de Proa (entrantes) de Cubierta (Arroces), de Puente de mando (principales) y de Popa (postres) y las tapas de la planta baja están definido como La bodega1. En el restaurante también puedes pedir, si lo deseas, además de lo que aparece en la carta, tapas de La Bodega 1 y cócteles.

Antes de pasar a relatar lo que tomamos, os invito a que contempléis una puesta de sol desde nuestra mesa del comedor .

Primeramente tomamos dos excelentes cócteles, un Tsunami y un Titanic (Ver fotos en el primer comentario) Una verdadera pasada, riquísimos. Soy incapaz de definir las composiciones de ambos, solo decir que el Titanic, el que yo tomé, era a base de whisky de malta y el que tomó MC a base de wodka y frutos de la pasión. Todos los licores que utilizan son Premium y poseen su propia estación de hielo.

Siguió un aperitivo, invitación de la casa, compuesto por un coctel a base principalmente de cava y melocotón, un helado de espinas y un recuerdo de la India Buen principio, buen anuncio de lo que iba a seguir.

Como entrantes, tomamos de proa, y compartimos :

El Ceviche, "limeño" Muy bueno y bien condimentado. Puro producto fresquisimo.

Anxoves com mai les has vist abans... o si (en 3 versions) Anchoas como no has visto nunca antes... o si (en 3 versiones). Preparadas, en salazón, en leche y acompañadas de parmesano y en vino tinto del Empordà. Excelentes anchoas de l'Escala, riquísimas. Puro producto de gran calidad. La que pasó mas desapercibida fue la preparación con vino.

Seguimos, yo, con un principal, del puente de mando

Peix de llotja a la brasa amb verduretes Pescado de lonja a la brasa con verduritas . Se podía optar por Dot, pescado blanco de la familia del mero o por Lluerna (Rubio). me decidí por el primero. Perfectamente cocinado, de intenso sabor y con un buen acompañamiento. Que mas se puede pedir ?

y MC con otro plato de la Proa :

Tartar de tònyina amb alvocat, perles de wasabi i algues nori Tartar de atún con aguacate, perlas de wasabi y algas nori. Muy rico y con wasabi de mucho carácter.

El pan que acompañó la cena y que provenía del Forn Marull del pueblo de Parlavà, era muy bueno

No tomamos postres, ya que queríamos compartir un pastel de queso y ya no les quedaba.

Para beber, tomamos una botella grande de agua UM y una botella de vino blanco ecológico Petit Caus 2016 DO Penedès de Can Rafols del Caus (Massis del Garraf), Cepages : Xarel•lo, Macabeo, Chardonnay, Moscatel de Alejandría, Chenin Blanc y Parellada . Acompañó bien la cena, fresco, mineral y bien equilibrado . Hubiese preferido un crianza, pero no habían.

Finalizamos con dos buenos cafés.

La cuenta ascendió a 61,50 €/persona. Buena RCP( sin los cócteles la cuenta hubiese sido de 51 €/persona). Buen ambiente, vistas extraordinarias y buena cocina, sencilla, de producto fresco de temporada, bien elaborada y presentada, con toques creativos. Todas las verduras y frutas son de l'Empordà y los pescados, salvajes, de la Costa Brava, las carnes me dijeron que son de donde encuentran las mejores y además excelentes cócteles y una buena carta de vermouths. La música en vivo solo se escucha en días programados y además abren de 11 h de la mañana a 2h00 de la madrugada.

Recomendable. En nuestra próxima bajada a l'Escala lo visitaremos de nuevo.