Las mejores vistas de la ciudad
Un local al que hay que subir con medios mecánicos y compartiéndolo con los saltadores de uno de los trampolines de salto más famosos del mundo y hay que ver que largos y anchos son las tablas de estos esquiadores; pudimos ver algún salto desde arriba y desde abajo y hay que tener valor para saltar al vacío a esa velocidad. Eso sí, si abres los ojos ves toda la ciudad a tus pies y todo el valle y las montañas de enfrente.
Esas son las mismas vistas que tiene este restaurante (solo las solicitadas mesas de la parte frontal), un local elegante, con buen servicio de sala que sin pretender dar una restauración de alta cocina, cumple muy bien su cometido que es comer y disfrutar de las vistas.
Para comer:
. Spaghetti bolognese con parmesano (10,40€)
. gegrillte Schweinsmedallons in Plefferrahmsauce dazu spätzle und brokkoli: medallones de cerdo con salsa de pimienta, verduras y gnocchis (16.60€)
Para beber: una copa de Grüner Veltliner DAC Weingut Dümber Weinviertel austriaco.
Un paseito antes o después por la zona te permite incluso tocar nieve en estas fechas y ver las zonas de pistas de ski alpino.
Una delicia de lugar aunque alejado de la ciudad.