Comer, comprar, sufrir

Las Rozas Village se ha convertido en lugar de peregrinación para los devotos de la moda y las marcas. Se ven excursiones de chinos paseando por el recinto comercial, que por otra parte está realizado con gusto. Como la gente va a pasar incluso el dia entero, se ha necesario la presencia de locales complementarios en la periferia y así está Heron City con sus salas de cines.. y sus franquicias del sector de restauración. Pocas opciones más quedan en la cercanía y entre ellas un asiático y un mexicano, pared con pared. Optamos por este local que se autodenomina taquería.

Está decorado como un sitio para sentirse cercano, "algo mexicano", en un comedor amplio con muchas mesas donde acuden entre semana y a medio día bastante gente que debe trabajar en las cercanías y que dispone de unos menús diarios interesante y a buen precio (16.25€ , 17.05€ hy 20€) siempre que lo comparta con otra persona.

Acepta reservas de El Tenedor con 40% de descuento en comida y es una buena opción para pasar a carta y comer a precio de menú. Al final el comedor estaba con buen aforo.

Cuatro para comer. empezamos con un aperitivo por cortesía de la casa: unos nachos con salsa con muy ligero picante. Para beber Aquabonna y, de las varias opciones de cervezas, tomamos dos cervezas "mexicanas". Pacífico y Modelo rubia, ambas muy ligeras como suelen ser las cervezas hispanoamericanas.  Los vinos de carta eran del estilo de Crianza Ribera, Rioja crianza...

Lo comido de forma compartida:

. nachos con queso fundido: el queso muy abundnate y demasiado fundido sobre los tacos dejaban una pasta que reblandecía ráoidamente los nachos; decoraban unas lonchas de jalapeños de picante medio.

. tacos del pastor en picadillo: carne de cerdo adobado con cilantro, cebolla y limón y con piña. Cumple bien.

. tacos de cochinita Pibil (x 2): cerdo marinado en achiote acompañado con su salsa de cebolla orada y habanero (como puré de frijoles). De lo mejor.

. taco de cordero a la barbacoa y se acompaña de cilantro, cebolla y limón: bien pero nada destacable de otros tacos

. ensalada de nopales con tomate, cebolla, cilantro y queso fresco (tipo Burgos). Espectacular presentación en una tulipa de pan horneado y comestible, de buen tamaño a modo de plato hondo., todo ello cortado a pequeños dados.

. taco de alambre con pollo con pimientos, bacon y queso con 3 tortitas y hubo que pedir un par de tortitas extra.

. postre compartido: pastel de elote con cajeta (similar al dulce de leche pero menos intenso) y bizcocho de maiz: un mezla de dos de los postres opcioneales que habían.

Una alternativa fuera de franquicias. Después vino lo peor: tarde de compras y sufrimiento. Lo que ahorramos aquí, lo gastariamos allí.