Restaurante Trattoria da Romano en Burano
Restaurante Trattoria da Romano
País:
Italia
Localidad:
Cód. Postal:
Tipo de cocina:

Añadir vino por copa

Precio desde:
65,00 €
(precio más bajo introducido por un usuario)
Nota de cata PRECIO MEDIO:
65 €
Servicio del vino SERVICIO DEL VINO
-
Comida COMIDA
-
Precio medio entorno ENTORNO
-
RCP CALIDAD-PRECIO
-
Opiniones de Trattoria da Romano
OPINIONES
1

Dedicamos el día a “las islas”. Parece obligado si vas a Venecia hacer una excursión a Murano, Burano y Torcello al menos. Nosotros, por falta de tiempo y por consejos locales, decidimos obviar Murano (excesivamente comercial e industrial, dijeron) y nos centramos en las otras dos.

Para llegar a Torcello, pillamos un barco desde Fondamenta Nova, que hace escala en Murano y acaba en Burano, donde te está esperando otro pequeñito muy chulo, tipo motora, que te lleva a Torcello. La duración total del trayecto no llega a una hora.

Un remanso de paz en el que se respira historia Torcello, y un cuento de hadas Burano, abigarrado de casitas de pescadores de mil colores diferentes saludando al pequeño canal que atraviesa la isla.

Dicen que los venecianos, cuando quieren comer buen pescado, van a Burano. El caso es que está repleto de pequeños restaurantes, todos con sus terracitas. Nos había recomendado dos, fuimos a verlos para elegir el más chuli, y como uno estaba cerrado, pues no hubo lugar a dudas, siendo el elegido este Trattoria Da Romano que nos ocupa.

“Locali storici d’Italia” reza en su fachada. Oño, y esto qué será? Googleé posteriormente a ver qué significaba esta distinción (“Locales históricos de Italia”) y se trata de una asociación que, literalmente, agrupa a Hoteles, restaurantes y cafés que han hecho historia. Los más antiguos y prestigiosos hoteles, restaurantes, cafeterías de Italia.

Por fuera no dice mucho, pero entras y accedes a un enorme salón, techos altos, luz natural a raudales, claridad, adornos clásicos, columnas y capiteles de mármol, lámparas de cristal, espejos…Las paredes sin embargo no guardan relación con esa magnificencia y dotan de calor al local con sus innumerables cuadros y fotografías de famosos que se agolpan en ella. Pintadas de verde un metro desde el suelo y trazas de rojo por arriba. Pareces haber retrocedido 50 años y estar en un restaurante de una isla de veraneo de la clase alta de algún país mediterráneo. Divino.

Las mesas, correctamente vestidas de blanco inmaculado, son rústicas y de madera, como las sillas. Camareros uniformados con chaquetas claras y pajaritas oscuras. Qué lugar más curioso.

Y qué se come aquí? Pues sobre todo, pescado, estamos en una pequeña isla, oiga. Y también tiene fama su arroz negro.

Hala, pues vamos, unas entradas al centro, y unos segundos individuales que siendo individuales se puedan compartir un poquillo y así probamos de todo, ¿vale?.

Antipasto misto di mare "Romano"
Fritura mixta
Risotto al nero di seppie
Sepia a la parrilla
San Pietro a la parrilla
Tiramisú

Pues muy bien oye, salimos encantados. Cocina clásica veneciana, sin complicaciones. Unos buenos antipasto marinos, una fritura lograda (“fríen” bien en Venecia), un risotto correcto (no alcanza la fama que le otorgan, pero bien), unas sepionetas para saltarse las lágrimas, un San Pedro como siempre, estupendo género, muy fresco, pero muy hecho (y no aprendemos, nunca nos acordamos de avisar que nos lo hagan poco), y un tiramisú excelso, el mejor de toda nuestra estancia, y probamos unos cuantos.

Para beber es vivir, exhibieron una buena carta de vinos, pródiga en referencias regionales, y nos quedamos, por consejo, buen consejo del propio que nos atendió, con un Monte del Frá Cá del Magro 2013 Custoza DOC Superiore varietal de garganega, fabuloso.

No es barato, Burano en sí no lo es, ni lo es Venecia, ya nos avisaron que aquí todo tiene un sobrecoste por la complicada entrada de mercancías y compleja logística dado el tema del acceso obligado por canales.

Bien, buena experiencia en un entorno pintoresco. Si el pescado hubiera estado menos hecho, hubiera sido “muy buena”. A la siguiente, avisaré, oño, no se me olvidará.

Cookies en verema.com

Utilizamos cookies propias y de terceros con finalidades analíticas y para mostrarte publicidad relacionada con tus preferencias a partir de tus hábitos de navegación y tu perfil. Puedes configurar o rechazar las cookies haciendo click en “Configuración de cookies”. También puedes aceptar todas las cookies pulsando el botón “Aceptar”. Para más información puedes visitar nuestra Ver política de cookies.

Aceptar