Comida en el BISTRO de MARIO SANDOVAL en Griñón, con el restaurante a pleno rendimiento (con todas las medidas necesarias de seguridad). En esta ocasión (comimos 3, incluido el niño): 

“Anchoa del Cantábrico con guacamole, tomate y pan de cristal” (anchoa fantástica), “Buñuelos melosos de migas de bacalao” (para disfrute del niño), “Parpatana de atún con tomate de árbol y fruta de la pasión” (en mi opinión la elaboración estrella del chef), y por supuesto el extraordinario “Cochinillo lechón asado a la leña con su piel crujiente”. Para los postres otra elaboración con origen COQUE: “Migas de chocolates con espuma de leche y helado de yogurt” 

De la carta de vinos, Rafael nos recomienda una de sus bodegas preferidas en Madrid VALQUEJIGOSO, en concreto, DEHESA DE VALQUEJIGOSO 2012 elaborado con Tempranillo y Cabernet Sauvignon (principalmente), y Syrah, Petit Verdot, Merlot, Graciano y Negral. 

El riesgo sanitario generado por el Covid-19 ha provocado el desarrollo de los programas “delivery” o “take away” dentro del sector, y más concretamente, como una nueva línea de negocio dentro de la alta gastronomía. En la capital los hermanos Sandoval han sido de los más activos en ese sentido, destacando la extraordinaria propuesta gastronómica de COQUETTOGO (que bien merece un comentario aparte), o la posibilidad de adquirir el famoso cochinillo lacado de Mario Sandoval en su BISTRO de LA ROMANIEE en Griñon.

Poder disfrutar de un cochinillo entero del que es considerado por muchos como el más afamado del país es una experiencia extraordinaria y muy recomendable. La pieza (creo que es un cruce de Pietrain y Duroc, de la raza John Dallas, con una edad de 3 semanas) es entregada directamente del horno (del mismo fabricante que el original del COQUE de Humanes o del más reciente COQUETTO) tras el milimétrico y perfecto proceso de horneado y ahumado.

El resultado es una jugosidad incomparable en el interior (con muy poca grasa), que contrasta con la crujiente y finísima capa exterior. Una locura en todos los sentidos.

El precio puede plantear ciertas dudas de inicio (130 euros la unidad), pero teniendo en cuenta que entre 6-8 (y sobra alguna ración) o hasta 10 comensales pueden disfrutar de la experiencia…, realmente estamos ante una propuesta bastante asequible. Servicio ofrecido solamente los domingos.

Para acompañar la comida, disfrutada en Humanes para mas INRI…, acompañamos el manjar con CARMELO RODERO Crianza 2017… Es decir… DE LLORAR.

A 5´escasos (en coche) del COQUE, los hermanos Sandoval tienen un espacio (LA ROMANÉE) para eventos varios (bodas, bautizos, comuniones…). Ocupando toda la planta baja del chalet principal han ubicado la sala del restaurante EL BISTRÓ, restaurante en donde degustar alguna de las elaboraciones más clásicas de Mario a precio razonable en ambiente familiar y “sin etiqueta” (tarde de sábado: sala llena).

Es Rafa Sandoval quien dirige el local el día de la visita, lo que nos permite disfrutar de un servicio de vino excelente y personalísimo, en donde podemos degustar referencias nada clásicas de la bodega (no tan excelsa como la de la “casa madre” y centrada en referencias más clásicas por exigencia de la clientela). Comenzamos con un fantástico VIÑAS DEL CAMBRICO 2013 de DO Sierra de Salamanca (85% rufete y 15% tempranillo) excelente y perfectamente servido; y finalizamos en los postres con GOBERNADOR de Emilio Hidalgo (D.O. Jerez Xérès Sherry), un vino elaborado con uva Palomino 100%, un vino de la clase Oloroso y envejecido por el sistema de crianzas y criaderas. Sorprendente.

En la oferta de carta se ofrecen 2 menús (degustación -39€- y gastronómico -49€-), nos decantamos por el segundo, compuesto por:

Como aperitivo, tres bocados de chocolate con foie, patata con queso y huevas de salmón y de salmón con queso filadelfia Los dos primeros muy buenos, el tercero más clásico (pero muy correcto).

- La “Crema de bogavante con dados de carabinero” es una intensa y sabrosa crema de bogavante con daditos de carabineros para acompañar. Muy bien
- “Ensalada de pulpo con vinagreta de tomate”. Muy buena presentación con tres capas de patata, ensalada y pulpo (muy bien cocido).
- “Rodaballo asado con vinagreta de chili y crema de patata”, presentación algo más pobre para un muy trabajo sobre el producto, que se acompaña de verduritas y de una interesante crema de patatas.
- “Cochinillo lechón lacado, con su carne jugosa y su piel crujiente”, por supuesto no puede faltar uno de los clásicos de la carta del COQUE, el fantástico cochinillo. Siempre excelente
- Como postre unas fantásticas “migas de chocolate con frambuesa y helado de yogurt”, perfecto colofón. Un postre palabras mayores.

Restaurante informal, ambiente acogedor, bien decorado y con un servicio profesional y atento. Fantástico para conocer alguna de las propuestas más clásicas del chef Mario Sandoval a un precio razonable.