Para seguirlo de cerca

Sabadell es una plaza muy difícil, cuesta muchísimo que un restaurante se consolide, a veces, un restaurante se pone de moda y triunfa, aunque no sabes muy bien porqué, y otras, un restaurante que lo borda, desaparece, como recientemente, El fil d'Ariadna, una gran pérdida.

En el local donde se ubica el Restaurant 23, yo ya he visto pasar, que recuerde, tres restaurantes.
Restaurant 23 tiene unos cuantos meses de vida, por lo visto, ha tenido una buena acogida, había visto su carta y me apetecía visitarlo.

Tiene un horario limitado, abre de Jueves a Sábados, es acogedor, con pocos cambios respecto al local anterior, mobiliario funcional, tapetes en lugar de manteles.
El servicio es muy amable, cercano y eficaz.

Los Sábados a medio dia, que es cuando nosotros lo visitamos, tiene un menú, por las noches una carta basada en platos a compartir.

En el menú de este Sábado, había propuestas que bien podríamos haber elegido de una carta.
Para empezar, los dos coincidimos en una focaccia de verduras y queso de cabra, nos sorprendió muy positivamente, buena base, bien cocinada y verduras y queso ligando perfectamente, fue un muy buen comienzo y nos hizo sentir que no habíamos equivocado la elección.

Para los segundos, un entrecot con pimientos caramelizados (creo), no fue mi plato aunque lo probé, correcto, buen sabor de la carne, pero se podría masticar mejor.

El otro segundo fue un arroz caldoso con cigalas, calamarcitos y mejillones, bastante bueno, sabroso, buen punto del arroz, mejillones de buen tamaño y frescos.

El menú (18€), incluía agua, vino y pan, el vino, un Capitol mas que digno, servido en copas correctas. Lo sirven por copas, por lo que deberían estar mas atentos a cuando una copa queda vacía.

Los postres, también incluidos en el menú, fueron carpaccio de piña, bueno, y buñuelos rellenos de crema catalana, mas buñuelo que crema, pero buenos también.

Un par de cortados para rematar, estos si, fuera de menú.

Yo he visto cariño en las elaboraciones, ya se que esto es un intangible que no se puede medir, pero es lo que hemos notado, volveremos a probar la carta para profundizar en su cocina, yo creo que puede ser uno de esos que se consolida, pero por méritos propios, les deseo mucha suerte.