Nueva visita a este multiespacio gastronómico en un muy corto espacio de tiempo, en esta ocasión recalamos en La Tapería, nos ubicaron en una mesa de reducidas dimensiones donde a medida que iban trayendo las distintas tapas se hacía imposible disponer de un mínimo espacio. Tuvimos que reclamar varias veces que nos retiraran las diferentes bandejas de las tapas ya consumidas
Pedimos mejillones al vapor, calamares a la romana, chistorra a la sidra y una tapa de paella, además de pan de coca con tomate.
Una copa de vino blanco Xarel-lo y una pinta de cerveza.
Nuestra intención era comer aquí a base de tapas, pero a la vista de la muy justa calidad que ofrecen optamos por dejarlo así como un aperitivo y terminar comiendo en otro local.
Os aseguro que en La Taperia no repetiré

Está ubicado en un pasaje del Paseo de Gracia en una nave de 3.700 metros cuadrados que desde la guerra civil se ha venido utilizando como aparcamiento, nave de gran altura donde la cubierta ha respetado la original construida con la típica volta catalana con grandes claraboyas, la decoración muy bien resuelta conservando la estética vintage original.
La oferta gastronómica cuenta con cuatro barras y cuatro restaurantes:
Barra de cervezas y conservas, barra de vinos embutidos y quesos, barra de ostras y cava y barra de cócteles.
Los restaurantes son: La braseria, La Llotja, La Tapería y La Paradeta.
Permanece abierto desde las 12 del mediodía hasta las 3 de la madrugada.

Nos acomodamos en la barra de ostras para hacer el aperitivo y pedimos 5 ostras de Bouzigues que aderezamos con chalota y un toque de pimienta y las acompañamos con una copa de cava Juvé Camps reserva de la familia para cada uno.
La nota ascendió a 28,75

A continuación nos dirigimos a la braseria donde entrando a la izquierda se puede ver la cámara frigorífica acristalada donde están expuestas las piezas de carne de las distintas variedades que ofrecen, ternera, vaca vieja con larga maduración y buey con larga maduración y de frente una gran parrilla para la cocción de la carne.
Compartimos un chuletón de ternera con un excelente punto de cocción, poco hecho , como es preceptivo para los amantes de la carne y que sirvieron troceado, como guarnición pedimos patatas fritas, y que patatas!!, como las de la abuela, cortadas gruesas, doradas, crujientes y nada aceitosas.
Pan de coca untado con tomate.
Dos cafés
Regamos el chuletón con Intramurs de la DO Conca de Barberà, servido a la temperatura adecuada, precio excesivo respecto al precio de bodega (x 2,5 aprox). El servicio se limita al descorche y primer servicio.

El servicio tanto en la barra como en el restaurante, joven atento y distendido.
La nota aquí ascendió a 78,70 €

En resumen, local con muy buena decoración, buena calidad y diversa oferta gastronómica, horario que permite cenar a la salida del cine o teatro, muy céntrico.
Precios elevados que se pueden justificar por la calidad del producto y por la gran inversión económica que ha sido necesaria para la puesta en marcha de este local.