En los alrededores de la Estación de Sants conviven centenar de establecimientos que ofrecen propuestas gastronómicas de nivel medio para turistas, habituales y trabajadores de la zona. De camino de de uno de estos establecimientos (ni de lejos el peor) a la estación descubro gracias su nada convencional y llamativa decoración (comprándolo con lo habitual de la zona) la existencia de MinE, en donde se ofrece un menú mediodía de precio ajustado (15 euros) con propuestas más adecuadas dependiendo de cada uno de los gustos.

La temática del local apunta claramente a la cocina catalana, en donde el chef Martín Parodi, sorprende gratamente tal y como pude descubrir dos días después de vuelta a Barcelona. En el menú mediodía se puede optar a 2 distintas propuestas para primero-segundo, más otras 3 propuestas en cada uno de ellos, que incrementa el coste económico de la cuenta final. Existen otros menús más interesantes y amplios.

A pesar de lo sugerente de las propuestas más “caras” del menú medio-día opto por las más económicas. Como aperitivos: “mantequilla con olivas negras” y “chupito de crema de calabacín” este segunda buena. El servicio de pan es propio (y muy anunciado), si bien, no fue lo que más me llamo en general.

El primero, el nombre en Catalán era muy sugerente, estaba compuesto por: patata cocida (gallega me pareció), acompañada de calabacín y pepinillo y salsa sabrosa a base de pimentón. Sobre toda el conjunto un espectacular huevo frito con puntillas, perfectamente aderezado. La cocción de la patata y vegetales excelente, presentación soberbia.

De segundo me decante por la merluza, interesante por tamaño y muy bien de cocción, que descansaba sobre… patata cocida, calabacín y pepinillo y esa salsa sabrosa a base de pimentón…, si era la misma. La pequeña decepción se torno en acierto porque maridaba perfecta con la merluza. Muy bueno.

No pude llegar al postre. Buen servicio de café (se acompaña con piedras de trufa), posibilidad de recurrir a vinos por copas, me decante por opciones locales (Tarragona), con un servicio muy atento y agradable. Decoración que alterna ladrillo, madera e industrial con bastante gusto.

Lugar de referencia si Sants es el destino (y algo más sinceramente). Muy recomendable e interesante.