Ni mas ni menos.......tapas y mas tapas.
Muy normalito para lo que estas pagando creo que tienen mucho que mejorar desde los vinos hasta toda la carta y el trato muy lento y por gente no muy bien preparada pues les preguntas y no saben.
Sobran las palabras para definir este establecimiento........... huir.
Huir. Decidimos probar suerte y nos salió mal la jugada. Una tabla de "¿ibéricos?" y quesos espantosa, con un jamón ibérico que parecía tocino y un queso que parecían tranchetes. El pan que nos sirvieron blandísimo, lo pedí para los "¿ibéricos?" y nos lo dejamos entero. La sarten de huevos rotos con pimiento verde y chistorra, era una sopa de aceite con patatas congeladas y huevo, muy de vez en cuando encontrabas algo de chistorra y pimiento. El montadito con un trozo de solomillo ibérico que parecía chicle, tuve que dejarmelo por la imposibilidad de masticarlo. Lo mejor el surtido de croquetas. 3 tapas, 2 montaditos, 2 aguas y pan... 31€ !!!.
Coincido plenamente con los dos comentarios anteriores.Un desastre,el servicio fatal:Nos tuvieron mas de media hora esperando en la barra.Al reclamar la tardanza nos subieron al comedor y cual fue nuestra sorpresa al ver solo tres mesas ocupadas.El servicio lento y atrotinado-me vertieron el aceite de la ensalada sobre la chaqueta y ni siquiera se molestaron en disculparse ni en cambiar el mantel .Al manifestarle que fuera más cuidadoso,solo se le ocurrio señalarme los percheros.Tuvimos que pedir la cuenta cuatro veces y después de oir gritos en la cocina vino una camarera distinta al que nos habia servido.?Tendria temor que le pidiéramos para la tintoreria¿
Absolutamente de acuerdo con el comentario de Loles. Rstaurante que solo venden presencia y nada más. La sarten de huevos rotos con patatas congeladas era para llorar. Los probres turistas que caigan en la trampa se van a llevar una pobre impresión de como se come aquí.
A mí me pareció un fraude del tipo de todas estas franquicias que están saliendo intentando dar una imagen de la España costumbrista de otra época.Sinceramente creo que hacía tiempo que no comía tan mal: Un jamón ibérico (que por supuesto no lo era), las famosas sartenes de huevos estrellados para llorar y unos montaditos que nos dejamos casi entero. El vino, ni mencionarlo. Me da pena el comentario anterior, porque me hace dudar de la objetvidad de los participantes.
En el mismo centro de Valencia, puede tomar con un excelente servicio, una sarten de huevos rotos con patatas, chistorras y pimiento; solomillo Iberico con queso Brie fundido y tocinito del cielo con un Viña Hermina Reserva 95 por un precio que ronda los 23 euros, amén de excelentes y variadas tapas si te encantan estas, muy bien.