Restaurante Can Carbonell en Sant Just Desvern
Restaurante Can Carbonell
País:
España
Provincia:
Cód. Postal:
Tipo de cocina:

Añadir vino por copa

Precio desde:
30,00 €
(precio más bajo introducido por un usuario)
Nota de cata PRECIO MEDIO:
30 €
Nota de cata VALORACIÓN MEDIA:
4.7
Servicio del vino SERVICIO DEL VINO
-
Comida COMIDA
4.0
Precio medio entorno ENTORNO
7.0
RCP CALIDAD-PRECIO
4.0
Opiniones de Can Carbonell
OPINIONES
1

Restaurante escogido por los méritos de estar cercano y ser uno de los pocos que abrían este domingo. Bastante lleno. Entre semana no disponen de menú y me dijeron que puede estar prácticamente vacío.

Situado en una Masía del S XIII.

De aperitivo aparecen en la mesa aceitunas y una escasas rodajitas finísimas de fuet. Nada especial. Pan de payès tostado y platitos con ajos y tomate. La mesa, el resultado de juntar dos mesas, para siete personas, sólo disponía de un juego de vinagreras. Correcto AOVE en botella de plástico irrellenable.

Pido como agua Vichy y me advierten de que tienen "Vivaris". Lo bueno es que te adviertan de entrada, supongo porque algún cliente como yo les ha devuelto la botella ya abierta. Lo malo es que en un restaurante tengan este subproducto elaborado en vez de la auténtica, aunque sea de otra marca equivalente. En restaurantes chinos de 6€ el menú te ponen un Vichy de medio litro.

Sirven agua mineral sin gas en botella de cristal, buen detalle.

De primero pido unos canelones, correctos, pero con mucho queso fundido en vez de queso gratinado. A mí no me molesta este modo de servirlos, pero entiendo que no es la receta más ortodoxa, jamás me los han servido así.

El cambio de cuchillos, inexistente. Dejo mis cubiertos semiembadurnados en restos de bechamel y queso en el plato y el camarero al retirarlos me pide que los recoja. Al ver mi reticencia, y sin decirle nada se ofrece amablemente a cambiarlos. Al menos se acordó al servir el segundo plato de traerme los nuevos cubiertos. No entiendo esta política de reutilizar los cubiertos, y mucho menos cuando la cuenta va a subir a más de 30€ por persona, que en una cuenta con postres y vinos se irá fácilmente a los 35-40€

De segundo, carta monótona de carnes con una variedad casi exclusivamente a la brasa y con posibilidad de salsa a la pimienta o al roquefort. Pedí lo único que tenía una discreta elaboración, costillas de cabrito a la milanesa. El camarero me advierte de que no son grandes como las de cordero, sino pequeñitas. De los pescados creo recordar que sólo o casi sólo había bacalao en diversas elaboraciones.

De segundo plato no vi ni un solo guiso, ni uno.

Ya entendí que entre líneas el camarero me decía que la comida iba a ser escasa. Las costillas de cabrito a la milanesa consistían en 5-6 costillas acompañadas de una abundantísima ración de patatas fritas. El plato costaba casi 16€. Las costillas estaban correctas. Las patatas ni las probé.

Sabiendo que el resto de platos de carne eran de 20€ o más, no entiendo porqué este platillo no tenía un precio equivalente y un par de costillas más.

No tomamos postre porque en casa nos esperaba la mona de pascua.

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