Opción gastronómica aceptable con posibilidad de espectáculo divertido
Decoración ecléctica, de tendencia moderna y exuberante, colores primarios en paredes, mesas, etc.
De martes a sábado ofrece cenas con espectáculo de Drag Queens y a mediodía, de lunes a sábado, ofrece sólo comidas, siempre con la opción de menú (20 euros por persona, al ser en nuestro caso menú fallero) a elegir entre unas cinco opciones de cada apartado, un entrante, un plato principal y un postre (en el caso de los postres las posibilidades a elegir son más amplias). La elaboración y presentación de los platos es más que aceptable. La vajilla y cubertería funcionales. El servicio atento y dispuesto.
La carta de vinos es muy básica, pero con alguna referencia interesante a precios comedidos. La cristalería fina y buena respecto a las formas. La temperatura de servicio correcta, pero el servicio del vino es muy básico se circunscribe a la prueba únicamente.
Un local divertido y con una opción gastronómica bastante aceptable.