Me decepcionó, ya que las críticas que había leído eran bastante positivas. Sitios como Xuwok o el Café Colonial no aciertan excesivamente con la comida ni con el trato, lo que es una lástima ya que los restaurantes en sí son bonitos y las ubicaciones más que interesantes.

Acabamos de salir de una velada muy grata en este Restaurante. Ambiente agradable y acogedor. Tienen una carta de vinos aceptable considerando que los vinos de gama alta los tienen subidos de precio. Tomamos un mixto de sushi, unos maxi roll y un arroz mandarin (recomendación de Carlos) ¡Una pasada!. Un servicio muy atento y cuidadoso. Les doy mi apoyo al problema que actualmente estan sufriendo de las dichosas obras que se estan realizando en sus cercanias. Les pido a todos los lectores de esta critica constructiva que se acerquen a este maravilloso restaurante.

Xuwok es una propuesta muy interessante de comida asiatica, aunque como todos los asiaticos de valencia, la comida esta muy europeanizada.
El servicio es agradable y eficiente.
Estan abiertos los 365 dias del año cos que yo veo como un valor añadido tremendo y la calidad precio es excellente.

me parece un sitio globalmente agradable.

A mí me ha sorprendido gratamente este sitio. El entorno es muy agradable, el precio no lo veo exagerado, ya que por 32 euros se puede cenar bien. La carta de vinos es variada... Repetiré seguro.

Pues yo no coincido con los anteriores comentarios. Me pilla creca de casa y lo he frecuentado desde que puse mi primer comentario (3/4/04). No he observado subida de precios (desde luego nunca fue barato), ni descenso de calidad, aunque sí puede ser irregular en algunos platos. La bodega sgiue siendo correcta y las copas adecuadas. Reitero la puntuación del año pasado.

He visitado este restaurante en varias ocasiones y siempre me resultó correcto, ciertos platos con encanto, buen servicio...
Hacía tiempo que no iba y, a la vista de los últimos comentarios, acudí de nuevo a ver qué había pasado. Debo dar la razón a estos últimas notas. La carta no ha cambiado pero sí ha subido de precio y el sushi tampoco estaba como antes, menor calidad del arroz y el pescado. La bodega sigue igual de coja, ahora ofrecen el "sushi-wine" de Freixenet (Oroya), como maridaje estrella y se han olvidado de los espumosos y los blancos con algo de cuerpo.
Servicio desinteresado, lento, trato poco afable...

No entiendo cómo pasa esto en un momento en el que existe una gran competencia de esta cocina en la ciudad.

Efectivamente, yo también me apunto a los anteriores comentarios!
Cada vez peor, de mal en peor, una lastima por que empezaron muy bien y era un local muy interesante y francamente agradable, pero no se que es lo que esta pasando, que esta cayendo en picado y a caída libre!
Flojea la comida, flojean las materias primas, flojean las referencias de bodega, al servicio parece que le debas dinero y para detrás no se por que articulo han subido exageradamente los precios...Un desastre!
Una lastima, decepcionante...Definitivamente fuera de mercado!

Tenía muchas ganas de ir, pero......., el resultado fue desilusionante. Llevo probando este tipo de restaurantes que calificaría de asiáticos, y la verdad es que me defraudó un poco. Elegímos el menú degustación compuesto por una ensalada fría, sushi, shashimi, un langostino y poco más. El postre incluido en el menú, era tan poco original como el que puedan servir en cualquier heladeria (sin faltar las correspondientes spray-bolas de nata). Bebimos un Casa de la Ermita (crianza) y dos cafés. Total para 2 personas = 84 eurillos.Cenamos animados por música árabe (si aunque sorprenda), ideal para la danza del vientre. Local estrecho y oscuro. Sin dudar, buscar las otras alternativas que nos ofrece la ciudad.

Otra de las muevas propuestas que más éxito está teniendo en valencia. mezcla de chino y japonés, nos decidimos por un menú degustación que nos dejó satisfechos. Excelente presentación de los platos, y en general un buen nivel. Tal vez lo peor es la falta de espacio (hay un intento de solución con mesas a distintas alturas) que provoca sensación de apretura. decoración en tonos negros, un tanto oscura y noté una falta de iluminación. tampoco me gusta la cristalera, que te convierte en un escaparate mientras comes. servico muy atento.

Local moderno de atmósfera tranquila y sosegada, música acorde y cuidada cubertería, cristalería y vajilla (a excepción del juego de café, ya muy visto). El único pero es la cercanía de las mesas, palmo y medio (medido!!!) con la de al lado.
Cocina oriental donde puedes disfrutar de una tabla de sushi que tú mismo puedes confeccionar, al más puro estilo sushi-bar. La oferta japonesa es mucho más interesante que la china por lo que yo me decantaría por aquélla.
Bodega bien nutrida aunque un poco escasa de champagnes (sólo tienen dos möets), escasez que se puede subsanar con algo más de variedad en cavas. Servicio atento y botella siempre en cubitera.