De regreso a Gijon donde se celebraba el 1º Campeonato regional de cachopo y cachopinos (8-18 mayo), decidimos probarlo de una zona rural. El cachopo, plato regional asturiano, son dos filetes de ternera grandes (suele ser para 4 personas) rebozado en pan y huevo y luego frito, y que en su interior se rellena al gusto aunque originariamente llevara jamon y queso.

Local que es comedor de un bar de poblacion pequeña y por tanto muchas mesas, mucho ruido, todo lleno, niños correteando... Servicio muy voluntarioso y algo desbordado. Carta de comidas con bastantes opciones aunque veniamos a tiro fijo. Carta de vinos muy clásica, pero más que suficiente para el tipo de local; de hecho a la salida vi en la nevera algunas buenas cosas que no figuraban en la carta.

Un buen pan amenizó la corta espera de entrantes para 4: pulpo a la gallega (o sea con cachelos), buena racion, tierno, bien de sal y pimenton. Champiñones a la sidra, especialidad del local, bien hechos poco aceitosos, servidos en cazuela de barro amplia.

De segundo el plato estrella: cachopo; tamaño dos palmos por casi uno, valió para los 4. Apoyado en patatas (poco interesantes) y cubierto con algún pimiento rojo asado, muy bueno, y unos pocos champiñones a la plancha. Carne muy tierna, espectacular tamaño de los dos filetes que empanan al jamon y queso. Barato, ya que costó este plato 18€, lo mismo que el pulpo.

De postres otra especialidad: frisuelo (fayuelo). Una especia de crep que lleva en su interior melocoton en almíbar, flan, helado y salsa de fresas. Algo así como el pijama antiguo pero dentro de un crep que la verdad es que lo hace más tolerable. Vi interesantes tarta de merengue (más recomendable) y tarta de queso todas ellas en raciones que eran más que grandes.

Para beber una de agua grande, Aquabona, y Marques de Riscal reserva 2007 de fácil beber, a buena temperatura y descorchado y dejado en la mesa. Una copa de albariño que no recuerdo.
Dos cafés mejorables pusieron fin al tema sin chupitos (es posible que el fragor del trabajo les despistara).

Curiosa comida típica, que al menos una vez merece probarse. Precio extraordinario, porque si quitamos 19€ + 2€ del vino, saldríamos a menos de 15€ por persona.