Buen descubrimiento

Quedamos tres parejas en este restaurante que le habían recomendado a un amigo conocedor de la cocina peruano y allí que fuimos.

Decidimos quedarnos en la terraza ya que esta es bastante acogedora (un soportal), hacía buena temperatura y la zona es muy tranquila (parece que estás en un pueblo).

Unas Cusqueñas, alguna copa de vino, algún cocktail mientras miramos la carta que acompañamos con unas aceitunas.

Pedimos para compartir:

- Camotitos dos cremas
- Yucas a la huancaína
- Ceviche de pescado (leche de tigre clásico)
- Tiradito de pescado (leche de tigre amarillo)
- 2 x Degustación de Causas
- Anticucho de Corazón
- Tacu Chaufa
- Una especie de flan con helado

A destacar el anticucho de corazón y el tacu chaufa. El resto de platos también muy bien, pero en la linea de los probados en otros restaurantes que también los hacen bien (también emplean la corvina para el ceviche). Lo más flojo fueron las Causas y el postre.

Unos Piscos para terminar. No soy muy de cocktails, pero me gustó bastante

El servicio es muy amable.
Un sitio muy agradable y recomendable para comer platos peruanos, bien hechos y bien de precio. Comimos tarde y cenamos pronto por lo que en condiciones normales supongo que estará sobre los 30€