Restaurante Marengo con Virginia Nieto. Innovando en Vejer

Nos encontramos con una casona con diferentes espacios repartidos en un salón y alguna que otra habitación. Paredes blancas reflejando lo que el pueblo representa y un servicio animoso y profesional. Una cocina con ritmo, amplia y equilibrada. Podemos encontrar propuestas con el sabor de Vejer e incursiones en nuevos sabores. Mucho de los platos de la carta lo podemos disfrutar como tapas, lo cual nos permite probar y probar.

Destacable, la carta de vinos; corta, pero con rotación y bien elegida, con buenos precios y buena la opción de todos los vinos o en su mayoría por copas. Así nos podemos montar nuestro propio maridaje plato y vino.

El restaurante está regentado por Virginia Nieto y su equipo, quién ya estuviera en primera línea montando las ideas de Dani García en La Moraga de Puerto Banús. Brillante curriculum para una emprendedora con ganas y pasión por seguir haciendo las cosas muy bien, y va en esa línea, porque además ha sabido rodearse de un ejemplar equipo.
Empezamos con una ensaladilla Rusa Top Marenjo, suave y con sabor ¡poco más podemos pedirle a este plato!, pero a veces lo sencillo es complejo de elaborar. Otro acierto es una ensalada de diferentes lechugitas con un saquito de queso del lugar, muy bien la combinación con el aderezo propuesto. Sin embargo un plato que no terminó de cuajar y previsiblemente porque dada las horas, lo hicieron para nosotros, y bien conocido es que este plato gana entero con las horas en reposo –al cuál no le dimos concesión-, fueron las lentejas con foei, bien el sentido y la propuesta. Como plato fuerte, podemos decantarnos por el carpaccio de atún, y jugamos a lo seguro, por producto y cómo viene marinado. Quizás una de las recomendaciones, que no pueden faltar en vuestra comanda, son las dos opciones de Mini Burguer, o bien la de retinto o la de atún, sencillamente deliciosas.
No hacemos mención al precio, porque no será impedimento para visitar Marengo, goza de muy buena RCP. Y háganme caso, prueben a maridar cada plato con un vino, porque siempre ganaremos sensaciones. Volveremos!