Este gastrobar, situado frente al mar, en el Paseo Marítimo de Cadiz, en la parte nueva, una vez atravesada la Puerta de Tierra, pertenece al grupo hostelero El Faro (Faro de Cadiz, El Faro de El Puerto, El Ventorrillo del Chato) .
Cenamos el lunes por la noche y fuimos los únicos clientes del restaurante, aparte unas 4 o 5 personas que tapeaban en la barra. La decoración es moderna, y el marco es agradable. Nos colocaron en una mesa elevada, con una especie de banco que yo encontré incomodisimo (fui el único que tuvo esta sensación ya que MC y nuestra hija estaban sentadas frente a mi en un banco normal. Sin manteles, mesas brutas, servilletas de papel y copas correctas. El Servicio de sala nada del otro mundo y el Servicio del vino inexistente (únicamente obertura de la botella, sin presentación visual y sin cata).

Compartimos todas las raciones y tapas que pedimos y que nos iban trayendo a la mesa sin respetar ningún orden ni esperar que hubiésemos finalizado unas para traernos las otras :

Croquetas caseras de jabugo No estaban mal pero no reconocimos el jabugo
Ensalada de aguacate y palmitos Correcta
Queso Payoyo Excelente
Crujiente de langostino Bueno,
Espárragos verdes en tempura Nada del otro jueves
Tempura de tataki de atún Al limite de lo aceptable
Mini hamburguesa con queso Según Anaïs, no estaba mal.
Raviolis de Foie Buenos
Pulpo plancha con patatas Bueno

Pan y picos. Nada que decir en su favor.

Regamos la cena con un albariño Martin Codax y finalizamos con 3 cafés.

Precio por persona 23 €. RCP no se como calificarla...

No volveré, salvo si todos los otros restaurantes de Cadiz estuviesen cerrados.