En su línea

Paseando por el Dubai Mall (posiblemente el centro comercial más grande del mundo) me encontré con el hermano del situado en Kuwait City y que visité al menos dos veces no hace mucho. La carta y servicio es copia del situado en el país vecino, aunque con aires más lujosos, acorde al ambiente general que se respira en este centro. Me ofrecieron mesa en la terraza (en esta época del año las temperaturas lo permiten)con una preciosa panorámica a la Dubai Fountain y al edificio más alto del mundo: Burj Khalifa (808m) (se encuentra prácticamente a unos 100m del centro, por lo que el edificio resulta impresionante). Si la cocina es algo más que aceptable, las vistas son impresionantes.

El servicio, en su línea de atención y eficacia.

La carta muy variada y siempre en torno de la cocina libanesa más tradicional. Lamentablemente, el pan de pita tradicional malo de solemnidad por no ser del día (me comentaron que ese día no hicieron pan por problemas en el horno, pero no me llegaron a convencer).

Cena para una persona:

- Labneh Maez: Clásica pasta de queso tradicional, en este caso de cabra. Su textura no es tan untuosa como los labneh que he probado hasta ahora, sino más próxima a la de los rulos de queso de cabra que se hacen en España. De sabor muy pronunciado a leche de cabra. Me gustó y más si se prueba con hojas de menta.

- Makdous: Berenjenas baby abiertas por la mitad y rellenas con algún fruto seco picadito, cayena, ajo, aceite de oliva y sal. No lo había probado hasta ahora y merecen la pena. Para los amantes de los encurtidos fuertecillos.

- Kibbeh Orfalieh: La tradicional carne picada de cordero mezclada con burghul (granos troceados de trigo cocido, troceados y secados posteriormente), cebolla, especias y menta. Lo he probado en otros sitios y me sigue gustado su untuosidad y suave sabor a carne de cordero.

- Kabab Bil Laban: Trozos alargados de carne picada de cordero y asados en horno. Esta variedad de kabab se presenta con yogurt fluido, trozos de pan de pita muy crujientes y piñones tostados. Correcto sin más.

- Mafroukeh: Un postre libanés que no había probado hasta ahora y quizás sea el que más me ha gustado. Consiste en una base horneada de granos de trigo muy molidos mezclados con suero de mantequilla, leche y azúcar. Al presentarlo, se añade por encima una crema de leche de vaca espesa y de sabor muy suave con trocitos de algún fruto seco muy picadito (en mi caso, pistachos).

En este local no se ofrecen bebidas alcohólicas, por lo que no puntúo el servicio del vino. Bebí solo agua.

Precio total: 40€ (inc. tasas y botella de agua de 1 litro a 3€).

Nota 1: El precio por persona indicado es lo que estimo que costaría comer en este local con tasas y servicio incluidos y sin bebidas.

Nota 2: Atención con las raciones que son muy generosas, especialmente los entrantes.