Nueva visita. La verdad es que fuí a probar el ViCool que han abierto cerca pero preferí volver a este para ver si podía volver a disfrutar como la última (y primera vez).

Me siento a la barra. Trato agradable y amable.

Al lío:
- Tapa ensalada malagueña (patata, bacalao, naranja): Error! En mi opinión la sirven en un recipiente inadecuado, la patata sosa y muy harinosa, proporciones descompensadas.
- Ajoarriero: Gran plato! Me parece perfecto, sin ningún "pero"
- Bacalao negro: La estética del plato es triste, pero el bacalao está muy bueno (macerado con miso y asado al horno). Un toque dulce como de miel muy rico, pero con sensación de que algo le falta al plato para ser un 10

Esta vez pido un café corto ya que la última vez fué un desastre; el camarero que se acuerda de mi me pregunta si un "ristretto", asiento y voilá, mucho mejor.

Resumiendo, se puede comer muy bien aquí, pero también uno tiene la sensación de no jugar sobre seguro. Seguiremos probando cosas

Estando por la zona y buscando un sitio donde comer algo, entré a este local guiado por el instinto.

La maitre muy amable. Como iba solo me senté a la barra para poder distraerme viendo la cocina ya que está a la vista.

Nada más sentarme, traen unas aceitunas y un cesto de pan que luego cobrán a 1´50€ (creo que lo reflejan en la carta). Pido una cerveza (Alhambra 1925) y despúes me traen la carta.

Comienzo a leer y me sorprende ver que esta incorpora creaciones de varios chefs famosos estrellados para este restaurante o gastro-bar (David Muñoz, Pepe Rodríguez, etc). El concepto parece platos pequeños de cocina creativa, "alta cocina" o como querais llamarlo, aunque "Alta" quizás sea demasiado. Creo recordar que ningún plato supera los 8€

Le comento a la maitre que me aconseje algo interesante y me recomienda una tapa de croquetas de choco y la hamburguesa de rabo. Despúes de dudar un poco y como soy fan de David Muñoz, pido el plato diseñado por él y otro de Pepe Rodriguez que suena muy bien.

Mientras espero, pruebo el aceite que tienen y me parece magnífico, así que empezamos bien.

- Tapa de croquetas de choco (2ud): Correctas pero pequeñas y un poco planas de sabor. A 2€/ud las encuentro caras para lo que son
- Tigre (Mejillones con tomate y espuma de bechamel servido en copa), David Muñoz: Le falta el punch y el factor "Guau" de los platos de David.
- Bull Burguer: Hamburguesa riquísima. El panecillo es perfecto. Gran plato!.
- Trufa de cocido, Pepe Roddríguez: Falsas trufas hechas con la carne del cocido recubiertas con polvo de setas y regadas con un caldo de verduras y el caldo del cocido. Muy buen plato!.

El servicio es muy correcto y amable. El local es moderno pero informal y con cierto aire a franquicia. Algún famosete en la sala que está a 1/3 de su capacidad. No me parece que sea el típico local de esos de postureo y de dejarse ver que luego tienen un bluf de cocina.

Como anécdota decir que en un momento hubo una confusión entre la maitre y yo (seguramente culpa mia )y no sé pasó la comanda del plato de la trufa. El caso es que lo solucionó enseguida a pesar de la hora (casi las 16:00,hora de cierre de cocina) y de motu propio trajo una cubitera para que no se calentase la 2ª cerveza que acababa de ampezar. Me pareció un detallazo

El café a 2´5€ me parece caro además de no estar bien preparado.

En resumen, creo que es un sitio donde si se sabe escoger, se puede disfrutar mucho, pero que también puede salir uno indiferente.

También decir que me gustan este tipo de locales donde puedes probar cosas diferentes a precio módico que se salen de la linea típica