Este restaurant esta ubicado en el hotel Wynn, en Las Vegas, concretamente en la torre Encore. Es un restaurant con un menu breve, con platillos no muy complejos, pero muy bien ejecutados. En este tipo de hoteles, hace unos años, trataron de introducir la comida de autor, pero no ha tenido mucho exito. Los que aun quedan son guy Savoy, en el Caesar´s, Joel Robuchon en el MGM, Michael Mina en MGM y Bellagio, y el español Julián Serrano en el Picasso del Bellagio. Otros como Thomas Keller, Daniel Boulud, Alex Stratta, entre otros, han cerrado y/o cambiado de tipo de comida.
Por lo general, en estos hoteles hay unos 5-6 restaurantes de los que se denominan fine dinning: Uno Japonés, otro Chino, un Italiano, un Steak House, uno de pescados y mariscos, y otro con un poco de todo. Cosa curiosa (probablemente por costos o por cuestion práctica de consolidar proveedores) aprox un 50% de los artículos del menu son iguales: Salmón, Halibut, Atún, Langosta, Rib Eye steak (entrecot), New York steak (mediana), Mignon (solomillo), y Costilla de Cordero, y tal vez algun corte Kobe. Eso si, muy bien ejecutado.

El Botero es un espectacular montaje con algunos cuadros del artista colombiano para 250 comensales. Gran ambientación, 2/3 de las mesas estan dentro y 1/3 estan en una terraza.
Servicio rápido y agil, a pesar de que estaba casi lleno.
Empezamos con un amouse bouche, con una gamba pochada a la mantequilla, luego empanizada, y con una beurre blanc con cebollín y ralladura de cítricos. Bien de sabor y consistencia.
Te traen pan de 4 tipos distintos. Uno muy bueno delgado y crujiente, otro un chabata normalito, un mini baguette con crosta de pretzel (esta de moda), y otro chabata integral.
De entrante Petí una tarta de setas y queso gruyere. El camarero me indicó que etan 4 tipos de setas. Estaba bien elaborada, la pasta de hojaldre crujiente, y el queso fundido en su punto, las setas cortadas en mirepoix. En lo personal me hubiese gustado que las seta no estuvieran cortadas tan finas, pero bien en terminos generales.
De plato fuerte,un New York Steak, calidad prime con chimichurri. De buen grosor, excelente cocción. En lo personal, me gusta mas la chimichurri que prepara mi buen amigo y chef Dante Ferrero en mi nalat Monterrey, pero el corte muy bueno. De guarnición (la pides aparte, de entre 12 selecciones) unos macarrones gratinados con queso añejo, y una nota de trufa, bien de sabor. Lo acompañé con una copa de Syrah de California (Santa Ynez Valley), muy buen vino - espécial para el corte de carne que ordené-pero me hubiese gustado un pelín mas fresco.
La carta de vinos te la traen en un I-Pad. He visto esto como en 4 o 5 lugares. En algunos es impráctico, pues te pierdes de gran parte de la carta, pero este caso estaba bien diseñado. En la pag principal vienen distintos menus o categorías: Vino por copa (6 blancos y 8 tintos - todos de distintos varietales y regiones), por región, por precio, o por varietal. Calculo unas 300 selecciones. el 80% era de Estados Unidos, Francia, e Italia. El resto, entre Australia, España, Argentina, y Chile, y Alemania en los Blancos. Una de las opciones en blancos por copas era Albariño Morgadio, lo cual me dio gusto, pues los albariños empiezxan a aparecer en las cartas de vinos Estadounidenses.
Mi mujer pidió unos ravioli rellenos de queso ricota, espinacas, gratinados de queso manchego, muy bien preparados, de sabor delicado, y la pasta delgada, muy fina y al dente.
Ya no pedimos postre pues mi carne era de buen tamaño.
Los precios tambien estan estandarizados en los restaurantes del hotel: entrantes aprox 15-30 dlls. Pescados 35-45 dlls. Cortes de Carne 55-65.
Como lo decia antes, la comida no es un deroche de originalidad, pero muy bien ejecutada. Lo prefiero a platillos super originales pero cuyo sabor deja que desear...y de esos ya empiezan a multiplicarse.