Restaurante Café Bar Manolo en L´Hospitalet de Llobregat
Restaurante Café Bar Manolo
País:
España
Provincia:
Cód. Postal:
Tipo de cocina:

Añadir vino por copa

Precio desde:
12,63 €
(precio más bajo introducido por un usuario)
Cierra:
Domingos
Nota de cata PRECIO MEDIO:
12 €
Nota de cata VALORACIÓN MEDIA:
4.0
Servicio del vino SERVICIO DEL VINO
-
Comida COMIDA
5.0
Precio medio entorno ENTORNO
1.0
RCP CALIDAD-PRECIO
5.0
Opiniones de Café Bar Manolo
OPINIONES
1

Sábado noche. Estuvimos algo más de 2 horas en el local. La primera hora la ocupamos en hacer cola hasta que nos sentaron en la terraza y nos tomaron nota de las bebidas. Buena parte de la segunda, encargando y esperando la comida. Lo único que puedo decir del interior del local es que era ruidoso. De la terraza, que conviene que te toque una mesa cerca de la entrada si quieres ver la comida. Es recomendable cerciorarse de que esté seca y coger con cuidado el servilletero. El nuestro se te quedaba enganchado a la mano. De esta guisa, cansados, mosqueados y sin apenas luz, pedimos la carta aprovechando que nos tomaron nota de las bebidas. Al cabo de un buen rato, con las bebidas ya medio vacías y sin haber pedido la comida, preguntamos de nuevo por la carta. Pasados unos minutos más, por fin llegó una hoja plastificada con 20 tapas calientes y 8 frías, todas muy tradicionales y sin indicación del precio. La espera nos permitió informarnos algo sobre los tamaños: las raciones dan para 3 ó 4 personas y las medias raciones, para 2. Sin saber de precios y con pocas nociones sobre cantidades, la camarera tampoco ayudó. Lacónica, arisca y con evidente prisa, se limitó a tomarnos nota y desaparecer durante un buen rato.

Empezamos con un correcto flamenquín algo salado y una ración de unas buenas patatas bravas, crujientes y con abundante salsa a base de allioli y pimentón dulce. Continuamos con 6 enormes y pesadas croquetas de rustido, media ración de boquerones fritos y media de "sevillanitos" (calamares rebozados), ambos con muy buen punto de fritura y algo insípidos los calamares. Acabamos, después de un buen rato de espera y las bebidas ya calientes, con un cochinillo con bastante cartílago acompañado de un aceite de sabor desagradable.

Para beber, un par de claras (cerveza con limonada) de medio litro que hubiesen agradecido una temperatura algo más baja, una copa de cerveza, un refresco y una botella de 1,5 l. de agua. No vi a nadie tomando vino ni nos lo ofrecieron. Tan solo un par de mesas tomaron sangría.

La cuenta consistió en una hoja algo rota cortada de una libreta de espiral, escrita a mano con letra casi ilegible (y eso que mi mujer es farmacéutica) y sin especificar más que el total, 50,50€, que intuimos más que verlo, ya que no tuvimos la previsión de llevarnos una linterna y nos dio nosequé sacar el mechero.

Aparte de lo descrito, algunos otros detalles que observamos (comentarios de uno de los camareros, comportamiento de la clientela, trato del servicio, menaje,...) nos convencieron para pensarnos muy mucho repetir. Si alguien se anima a ir, que no espere oropeles y reverencias... por ser políticamente correcto. No aceptan tarjetas.

Por cierto, me lo recomendaron... Y parece ser que llena sin dificultad.

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