Nos agenciamos este whisky blended japonés tras recibir muy buenas críticas. Leemos que "Nikka fue creada en 1934 por Masataka Taketsuru, el "Padre del whisky japonés", que viajó a Escocia en 1918 para descubrir los secretos de la producción de whisky"... y eso es mucho decir tras ver la evolución de la calidad y más aún, los premios obtenidos en los últimos años por los whiskies japoneses que superan a los escoceses. Éste nos viene en formato de 50 cls, y llama la atención su 51.4% de alcohol. Lo metimos un rato en la nevera, servimos en vaso corto y procedemos con su valoración a 10°C. Tapón de rosca.
VISUAL: Precioso color ambarino con matices cobrizos y reflejos dorados, de cierta evolución. Presenta una lágrima abundante, fina y transparente (92).
OLFATIVA: Encontramos aromas de flor silvestre, de lavanda, acompañados por herbáceos de hinojo y un puntito de fruta con hueso (albaricoque y melocotón). Agitamos y asoman especiados avainillados con notas dulzonas de caramelo y natillas. También podemos percibir fragancias de pimiento rojo, como si caberneteara, con toques de frutos secos (nueces y almendra cruda) y un matiz cítrico de corteza de naranja. La madera muy sutil, muy bien integrada, acompañando unos sutiles recuerdos de fruta roja, como de cereza. Descriptores muy bien definidos y de intensidad media (92).
GUSTATIVA: Para esta fase, le ponemos un cubito de hielo durante unos 20 segundos, para rebajar el grado alcohólico y su temperatura, cosa que agradecerán nuestras papilas. Aún así resulta intensamente licoroso, con sabores de caramelo de naranja marcados en su paso por boca, cremoso y amplio. En retronasal nos vienen recuerdos de flor blanca, de azahar y notas de frutos secos, almendra y nuez. Post-gusto cremoso y licoroso, con un puntito picante de pimienta blanca y con los aportes de la madera, ebanistería fina, y con presencia de guindas en licor. Al rato asoman ahumados, herbáceos y algo de chocolate negro, para terminar con un predominio alcohólico y amaderado final, de gran elegancia. Persiste casi cuatro minutos en boca. Mezcla muy conseguida, compleja y cálida (92).
La RCP me parece buena. Pagamos 37 euros por 0.50 cls, unos 55 euros los 75 cls.
MARIDAJE: Nos lo hemos ido tomando en las sobremesas, con frutos secos, con diferentes chocolates, con café expreso, incluso con algún heladito. Con los frutos secos en concreto es una delicia. Muy recomendable.
VIDEOCATA: https://youtu.be/-waxdYLGv-A
Salud-os!!
La destilería definitivamente es el sitio perfecto para los amantes del whisky y los turistas. La mayoría de los visitantes son, todavía, japoneses, pero hay muchas extranjeros también. Las excursiones son en japonés pero puedes escoger otros idiomas.
Lo que más me gustó es la zona ya que es muy tranquila y relajante. También caminas fuera del edificio para ir a otro edificio y disfrutando siempre de los placeres del whisky.
Me gustó muchísimo esta excursión!
Whisky y Japón no son dos palabras que uno esperaría normalmente en una misma frase, pero, en concreto, esta destilería ha producido whisky galardonado. Si estas en Yoichi (Japón) y tienes tiempo, no dejes de hacer la excursión por esta destilería ya que es una visita muy entretenida y encantadora. Hay un interesante museo, una sala de degustación y una tienda de regalos.
Lo probé nada más llegar aquí y me encantó!
Como indica su nombre "from the barrel" este blend es un cask strength, es decir, embotellado sin rebajarlo con agua directamente de la barrica de su segunda maduración.
De ahí su alta graduación 51.4%.
Color: Ámbar oscuro con reflejos dorados, muy luminoso (colorante E-150).
Nariz: De aroma excepcional, destaca el ahumado, la fruta madura (melocotón,cerezas),
frutos secos (almendras), piel de naranja, matiz a resina seco, denso, redondo y muy complejo.
Boca: Se corresponde bastante bien con las notas de nariz, se confirma el ahumado, las notas a almendras, la naranja y aparece la menta, muy intenso, denso, con mucho cuerpo y final ligeramente amargo pero sin llegar a ser astringente.
Por compararlo se parece a un Highland o a un Islay de calidad, es increible que un blend
japonés pueda tener la calidad de un malta escocés. No sólo no tiene nada que envidiar a los blends escoceses sino que supera el nivel medio de éstos. Absolutamente recomendable por su gran relación calidad-precio. (25 euros-500 ml).
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