No soy muy de orujos, sino más bien de dulces tipo moscateles o PX, pero a falta de ellos a veces hay necesidad de irse a los orujos y aceptar lo que pide la mayoría y por tanto hay en restauración.
Pero si hay que tomar un orujo, mejor de marca que esos caseros que luego necesitan de omeprazol. y desde luego de los que aportan algo dulce como este orujo de café y que además el café se apodera de la sensación de alcohol en boca.

Color marrón café con leche hacia toffe, denso, lágrima persistente.
En nariz destacan aromas de café, chocolate, caramelo tostado, toffe sobre un fondo de praliné y avellanas.
En boca es cremoso, se nota poco el alcohol, es untuoso, sensaciones de café, cacao, avellanas, caramelo tostado. Buena persistencia.

Un orujo que se hace más fácil de beber.