Vino comprado en una pequeña tienda de Cuenca capital durante un viaje que hice hace poco más de un año.

Multivarietal (4 variedades) con 18 meses de crianza en barrica de roble francés y americano.

Cápsula peculiar de círculo plástico y después el corcho, más bien largo, grueso y perfecto, sin apenas penetración del vino en la parte interna.

Visual: rojo cereza oscuro, capa media, ribete cereza-transparente con ligeros destellos anaranjados (quizás de la crianza en barrica y de sus 7 años largos de vida). Limpio, brillante y con una fantástica y abundante lágrima que cae en forma de palmera. El vino se ve en un momento óptimo de consumo, ni muy evolucionado ni muy joven.

Nariz: de buena intensidad, fruta negra sobremadurada y licorosa, muy mineral, especiado y balsámico. Especias dulces y lácteos abundantes. Muchas uvas pasificadas con la aireación. Maderas finas. Algún toque terciario a cueros, desván y carne cruda. Bastante complejo en nariz.

Boca: entrada fácil, sedosa, pulida, de taninos dulces y sabrosos, un ligero toque amargoso (probablemente de la CS) compensado por notas ligeramente dulces (quizás de la syrah y, sobre todo, la merlot). Buena estructura y acidez. Buena complejidad y potencia, volumen y acidez medias. Final largo, con postgusto a uva pasificada y retronasal especiada y balsámica muy agradable.

Maridado con una fabada asturiana, al principio el vino se quedaba un poco justo para el plato pero con la aireación ha ido ganando potencia, complejidad y mejorado en nariz y mucho más en boca.

Importante por tanto, oxigenar/airear el vino 30-45 minutos antes de tomarlo.

La RCP es muy buena pues su precio, aunque ronda los 10 euros en algunas tiendas, puede conseguirse en torno a 7-8 euros con relativa facilidad en ofertas de la red y en determinadas tiendas de Cuenca y Tarancón. En mi caso lo conseguí por 7.75 euros, un precio fantástico.