He comentado anteriormente que mi única experiencia con los vinos canarios fue hace ya unos cinco años con un tinto que me pareció excesivamente volcánico y especiado. Pero durante este periodo he desarrollado gustos nuevos y toca volver a dar una oportunidad a los vinos de esta zona. Escojo este Envínate Palo Blanco 2021 del que oigo cosas buenas.

Abre en nariz con un intenso aroma mineral (pedernal) con manzana verde, fruta blanca madura, pimienta negra y también cierto recuerdo de membrillo y amielados. También notas de pólvora o sulfurosas pero sin exageración. Nariz compleja e interesante. Y con tiempo en copa va abriendo matices florales.

Paso a fase gustativa con cierta cautela por la experiencia anterior (cierto que con tinto) para sorprenderme inmediata y positivamente con un vino muy seco de cuerpo medio y muy salino y mineral y excelente acidez. Sabroso y largo! Y en ocasiones me parece percibir un agradable contraste (con la mineralidad) goloso. Alcohol poco perceptible. Tiene toda la pinta de que va a desarrollar mucha más complejidad y textura con unos años de botella.

Muy diferente de cualquier blanco que haya catado hasta hoy por este carácter volcánico y especiado, pero esta vez sí he sido capaz de apreciar lo positivo que ofrece.

Realmente ha debido cambiar mi paladar estos últimos años!