El restaurante Ron en Amsterdam, de dos estrellas Michelin a Gastrobar.

Se acercan las vacaciones para muchos y es posible que entre los destinos elegidos se encuentre la turística ciudad de Amsterdam. Recientemente he pasado un par de días allá. Por supuesto, y de antemano, tenía bien elegidos los lugares donde iba a cenar. No concibo desplazarme a otro país y no probar su gastronomía local.

Entre mis primeras opciones, y bien asesorada por terceras personas que manejan información de primera mano, se encontraba este desenfadado local; Ron Gastrobar. El Ron, se ha despojado de sus dos estrellas Michelín para emprender una nueva etapa, sin presiones ni obligaciones, a precios más asequibles y con una carta de platos de lo más apetecible.

Valiente decisión la de renunciar a dicho estatus, pero sin duda acertada en su caso. La terraza, que fue donde cenamos, se encontraba a rebosar; con ambiente chic y gente bien de Amsterdam. Ni un turista. Salvo nosotros. Genial!!

La carta del Ron, se compone de entrantes y platos principales de pequeño tamaño. Cada uno de ellos tiene un coste fijo de 15 euros. Salvo un par que requieren un suplemento. La calidad precio me pareció estupendísima. El rastro estelar sigue permaneciendo tras cada una de las elaboraciones que se componen de ingredientes de primera, e integran combinaciones de lo más originales, sabores únicos y bien orquestados. Este es el "Salmon sashimi with sesame, ginger y yuzu", delicioso al precio de una tapa de gambas a la plancha de cualquier bar.

Y este otro el "Sutch asparagus with Oostershelde lobster and champagne sauce". Se trata de uno de los platos con suplemento que pasa a costar 20 euros lo cual está absolutamente justificado; salsa de champagne, langosta.... un entrante sublime propio de un restaurante estrellado, aunque para nuestra suerte, muy asequible. El servicio es relajado, camareros jóvenes y espontáneos, mesas sin manteles, informalidad..... pero una cena de primera.

Mención especial merecen estos aperitivos que el servicio nos colocó en la mesa al comenzar. Las cebolletas, especiadas, no me hicieron demasiada gracia, pero la mantequilla caramelizada con cebolla crujiente, me pareció lo más. Era una versión diferente y deliciosa de la clásica mantequilla que se sirve para acompañar el pan. Fue llegar a España, aterrizar en mi cocina y tratar de reproducirla. Creo que lo conseguí, podéis verlo Aquí y descubrir una nueva dimensión de los panes con mantequilla.

Este plato me pareció espectacular. Es el "Sauteed foie gras with cherries, beetroot and almond". Visualmente muy atractivo, arriesgado pero exitoso su maridaje con remolacha, cerezas y almendra. Tomad nota los cocinillas... nuevas ideas para presentar este manjar que es el foie!

Cuando leí King Crab en el menú no me puede resisitir. Me encanta el "cangrejo gigante" que por cierto en la foto no se aprecia por estar bajo el manto del "creamy mashed potatoes" pero creedme que estab de muerte, y ese jugo de marisco espumoso... una delicia!

No fui la única en la mesa en solicitar el magno cangrejo!

Las hambuguesas gourmet parecen haberse puesto de moda. Yo soy super fan de Hamburguesa nostra; ofrece hasta 30 variedades de deliciosas hamburguesas incluida la de Wagyu Kobe; super especial. En Ron Gastrobar ofrecían la "Wagyu burger" whit red onions, tarragon  (estragón) and sorrel. ¿¿

Riquísima.

Un risotto para cenar??? Pues sí, la verdad es que resultó un tanto contundente, me lo esperaba más mini. Pero no me importó nada... estaba con buena disposición, y descubrir el hinojo en dados crujiendo junto al arroz meloso se convirtió en una adicción repentina que no me dificultó nada la tarea de terminar el plato. El toque de limón y las puntillitas tostadas...delicioso. Una combinación exclusiva y sensacional!

No pensaba acabar con un postre... pero tras leer la carta fue imposible resistirse. Este con crema de limón, merengue, gin tonic  y helado era el clásico suave y refrescante. Pero yo soy muy fiel a los de chocolate así que no puede evitar probar la inverosimil combinación que nos proponía el chef Ron Blaauw.... cacao y bacon!!

La entrada de la noche en la terraza dificultó la toma de esta instantánea, pero se puede apreciar perfectamente el crujiente de bacon acompañando una crema, mousse, bizcocho y finas láminas de chocolate, todo al mismo tiempo.... con el fresco contrapunto de un helado de frutos rojos. Un postre formidable que será seguro fuente de inspiración para mis platos dulces este verano.

Muy recomendable el Ron Gastrobar si piensas viajar a la ciudad de Amsterdam!

Beatriz G.

www.tobegourmet.com