No habíamos vuelto a esta tasca desde el último comentario, y veo que hace casi dos años desde la última visita, estando allí, me parecía que fue ayer, me escandaliza lo rápido que pasa el tiempo...

Recodábamos los huevos estrellados, así que repetimos, esta vez con butifarra negra, el mismo resultado, buenos, y la combinación de la morcilla muy bien.

Unas croquetas de pollo rustido, la ración son cuatro y el tamaño grande, buenas, no hace mucho estuvimos en Tapas 24 y las comparábamos, estas tenían menos pollo y algo mas de bechamel, a mi me gustaron mas las del Tapas, a mi mujer estas, en cualquier caso,m estaban buenas y son recomendables.

Berenjenas rebozadas con miel, las esperábamos tipo chip y crujientes, pero fueron tipo bastoncito y con un leve rebozado, buena ración también, correctas, nos gustan mas en "formato" chip.

Y por último, albóndigas con sepia, algo decepcionantes, nada que ver con el guiso tradicional, poca sepia, salsa de tomate excesivamente viscosa con toques picantes, no digo que estuviese mal, pero desde luego, no son las albóndigas con sepia de siempre.

No bebimos vino, tomamos algunas cervezas.
Bien, la cosa funciona mejor o peor, dependiendo de la elección de los platos, en cualquier caso, el local sigue lleno dos años después y con la que está cayendo, es todo un éxito.

El diario de Sabadell publicaba una guía de tapas y vinos por el centro de Sabadell (http://www.diaridesabadell.com/la-ruta-de-les-tapes-i-els-vins/) por si a alguien le interesa, y decidimos dar una vuelta por ese recorrido, visitando un par de lo locales.

El primero fue el Picuteig, muy buena ubicación, zona peatonal, es una tasca moderna, con una bonita decoración, maderas y parquet claros, bastante grande, me llamó la atención que tienen una mini sala para niños, de poca capacidad, eso si, con algunos juegos y pelis de dibujos, no está mal la iniciativa.

El local estaba lleno y cuando nos íbamos aún había gente esperando, por lo que es recomendable reservar.
Es una puesta moderna del bar de tapas, una carta amplia y sugerente, tapas elaboradas algunas, otras algo mas clásicas, también pinchos, una parte de la carta es un menú de tapas para compartir. Buen servicio y recepción.

Pedimos unos huevos estrellados con chistorra (también pueden ser con foie, jamón ibérico o butifarra negra), buenos, patatas caseras. Una cazuelita de dados de solomillo con foie, muy bien, carne tierna sin nervios y un par de pinchos, foie sobre manzana carameliza y reducción de Pedro Ximenez (espectacular) y Butifarra negra con all i oli.

Carta de vinos corta, el vino bien conservado en los armarios climatizados, los vinos por copas se limitan al de la casa, un cosechero, que no se que marca es, que es el que pedimos nosotros y no estaba mal, también hay botellas de vino pequeñas. Copas correctas, algo pequeñas.

Interesante, muy interesante la oferta de este bar.