Impresiona la entrada a este "gigantesco" restaurante; espacio formidable, antiguo almacén de la zona portuaria, techos a más de 10 metros, suelo de parquet, fuente y pequeño lago.... recepcionista con walk-talky que busca tu reserva en una enorme lista y autoriza tu entrada tras varias conversaciones con el artilugio....la puesta en escena, decoración y proporciones del restaurante, sugieren unas altas expectativas.
Buen trato y atención del numeroso equipo de camareros, vajilla, cristalería, mantelería y decoración de nivel alto. Buena carta de vinos, con predominio de los locales. La cocina, inexplicablemente, no estuvo a la altura del resto, y esa noche, aunque era sábado, no tenían ni la mitad de ocupación del local.
Unas entradas denominadas "fantasías del chef" que casi neutralizaron la buena impresión que me estaba causando esta visita: unos "vol-au-vent" de pesto húmedos y fríos de nevera, un "revuelto" de espárragos poco hecho y unas pequeñas porciones de foie, también frías en exceso. Continuamos con unas "vichisoise" con exceso de fibras y como platos fuertes, una "garupa" (lomos de pescado parecido a la merluza, tournedó con setas y costillas de cordero marinadas. Estos sí bastante más acertados que las entradas aunque tampoco para lanzar cohetes. Como ejemplo, la guarnición del pescado fueron unos aros de cebolla frita (casi cruda)sobre los que aparecía una cucharadita de miel con trocitos de nueces.
Acompañamos los platos con una botella de Perfil, D.O. Douro, de una buena relación calidad-precio. Un único postre y cafés o infusiones para cerrar.
Es una lástima que, en lo fundamental, mi calificación de este restaurante no pueda ser muy buena, pero, sinceramente, debería ofrecer algo más para estar en consonancia con el resto.

Antiguo almacén portuario rehabilitado por los propietarios de la famosa discoteca de Lisboa , Kapital.Lugar romántico a pesar de su capacidad para unas 500 personas donde además prima el diseño. Comida elaborada y buena.
Servicio del vino y copas muy corecto.A vistar estando en Lisboa.