Voy a dejar de hacer comentarios sobre este sitio, o empezareis a pensar que me pagan una comisión o que formo parte de la plantilla,(desgraciadamente no es asi), pero...nueva cena ( esta vez con los compis del cole) y de nuevo experiencia positiva, con infinidad de detalles que te hacen sentirte comodo (cambio de menu degustación,pues ya conocia el que estaban sirviendo, descorche de un magnun de Pintia a coste 0, con un servicio impecable,). Vivaldi siempre me sorprende agradablemente, junto con Cocinandos y Luniega forman el trio infalible en León.-

Nueva visita, y nueva experiencia positiva (muy positiva), cenar deleitandose con unos de los edificios embleticos de la ciudad es ya por si, algo que justifica una visita al local, si a esto unimos un servicio excelente, (con detalles que ya no se estilan, al preguntarle por un acompañamiento de un plato y manifestarle que me encantaba de una determinada manera, saco una pequeña ración del mismo antes de elegir menu, unas piparras a la plancha), la posibilidad de llevar tu vino, (y disfrutarlo con una mas que correcta cristaleria, servicio...), un menu degustación que siempre me gusta y me sorprende, y una RCP correcta, hacen que Vivaldi sea mi elección en León para una cena especial, o un pequeño Homenaje.

Primera visita a este clasico restaurante Leones en su nueva ubicación en la primera planta del museo de arte contenporaneo de Castilla y León, en la planta baja (al lado de la tienda de recuerdos), ha abierto un "bistro"(creo que se los llaman así), bocadillos de calidad, hamburgesas con fundamento y excelente carne, ensaladas ricas y vistosas, y precios comedidos, sitio interesante, desenfado y un perfecto y mejor sustituto a los establecimietos de comida rapida y mala.-
Lo primero a destacar del restaurante es las magnificas vistas (os recomiendo que soliciteis una mesa cerca de la cristalera), mesas bien vestidas, siempre tiene (como en su antigua ubicación), algun detalle que me sorprende y procuro plagiar, separación entre mesas que ya no se ve en ningun lugar, quiza la propia disposición arquitectonica condiciona para mal la distribucción de la sala. El servicio correctisimo, atento y eficaz, da gusto encontar alguien que te sirva correctamente el vino (en este caso un champagne Cédric Bouchard, inflorescence, 0€ precio de descorche), marcando los tempos sin agobiar, pero sin esperas incomodas. La comida sigue brillando a un gran nivel, menu en "miniatura" que no te deja con hambre...todo riquismo destacaria especialmente el calamar a la parilla con arroces en tres texturas y el secreto de cerdo a la brasa, salsa de nueces miel y naranja. Lastima que un sabado por la noche el comedor estuviera a la mitad de su capacidad, ¿tanto acepta la perdida de una estrella?, ¿o la perdida de su alma mater?, ¿o la gente no conoce su nueva ubicación?. En definitiva uno de los mejores sino el mejor de los restaurantes de la provincia de León, en el cual, siempre que mi cartera me lo permitire, espero ddisfurtar de grandes comidas.

El restuarnte con todo su equipo (copas,manteles...etc), ha cambiado de ubicación y pasa a ser el restuarnte del musac...habra que ver.

No se si sera la tan manida crisis, o realmente sera una forma de celebrar el 20 aniversario del local, en cualquier caso, me acerque a cenar al local atraido por el menu degustación al precio de entonces, 35,52€ (menos de la mitad de lo que suele costar un menu degustaciónsin vino), por persona (incluido pan, café, y un mas que aceptable vino Peique viñas viejas).
El local esta enclavado en pleno barrio humedo muy cerca de la catedral, se trata de un restaurante peculiar, tres plantas de restuarante. Servicio atento, agradable y profesional (casí había empezado a pensar que este tipo de servicio había desaparecido, o al menos estaba en vias de extinción). Cristaleria Ridel incluso para el agua, mesas amplias bien distancias, y decoración de los comedores que predispone para el disfrute. Carta de vinos quiza algo corta, vinos leones, los "clasicos", alguna referencia extranjera pero sin demasiados riesgos, sevicio del vino bien.
Respecto al menu sin resultar ningun plato espectacular, todo rico. En resumen una gran RCP, y una estupenda oportunidad de conocer o descubrir un local "distinto" en León. Lastima que no mantengan el precio

Para mi no hay ninguna duda de cual es el mejor restaurante de leon,en atencion,local y comida.Las cuatro veces que fui,a cada cual mejor.

Cena para dos el fin de semana pasado. No nos atrevimos con el menú de degustación porque habíamos tenido una comida copiosa en el trayecto a León.
Los aperitivos con los que obsequia la casa son dispares: la croqueta de cocido sobre crema de cecina es magnífica, sin embargo el rollito de queso es insulso.
Primer plato compartido: garbanzos con gambas al ajillo en su jugo, es un plato realmente sencillo que debe estar perfecto y lo está. Segundos: Tartar de buey con vinagreta de nueces, aceite de nuez y pan de parmesano (insipido), correcto aunque no emocinante. El otro plato sí es magnífico: bacalao a la brasa con espuma de ajoblanco y virutas de jamón ibérico.
La carta de postres no es muy apetecible, por lo menos para mí, y fue difícil escoger, al final una crema de queso con sopa de caramelo, prescindible.
El vino, recomendado por el metre, fue un Pardevalles, tierras de León, crianza del 2001, un vino con cuerpo, bien servido en unas copas Riedel, a la temperatura correcta y a un precio más que ajustado. Lo bebimos con gusto, la verdad.
El servicio es atento y profesional.
El comedor, en la planta primera, pese a una iluminación no muy conseguida, y una decoración un tanto rancia, resulta acogedor y agradable.
El precio por persona es de unos 45 euros.
Francamente, esperaba un poquito más.

Mi primera incursion en un restaurante con * michelin.
El local sobrio, manteleria de hilo impecable, copas Riedel, cada palto presentado en una vajilla diferente, el servicio correctisimo pero sin agobiar, vamos todo estupendo.
Pedimos el menu degustacion de temporada 60 €, que maridamos con un As-Sortes fermentado en barrica que acompaño la cena a la perfeccion.
De entrantes empezamos con un "Bacalao ahumado sobre Mango" le siguieron "Rollo de Atun con granizado de Tomate", "Taco de Atun Rojo" y "Soda de Tomate con polvo de Tomate y Peta-zetas", continuamos con "Guisantes con Jamón" y "Pata filo de guisantes con sopa de Piña y menta", le siguio un "Risotto con boletus edulis y foie" (Una delicia). "Lubina salvaje con pesto" y "Solomillo de ciervo con tallarines de patata y salsa de colmenillas", luego un plato de queso "Queso de cabra macerado en citricos, galleta de mantequilla y gelatina de Fruta de la pasion" (un espectaculo de sabores). De postre"Milhojas de mantequilla de Valdeón, crema de nata cocida, helado de cuajada de Mansilla con pimienta de Souchan y salsa de toffe" para rematar una magnifica cena.
Al final de la cena bajo Carlos Cidón a saludarnos y estuvo majisimo.
El mejor restaurante donde he comido numca, con eso lo digo todo.

Restaurante ubicado cerca de la plaza mayor de Leon con buena decoracion en un edificio con varias alturas. Tomamos el Menu Degustacion de 60 € ; y al contrario de los demas comentarios nos gusto bastante ( atun rojo marinado en ensalada, garbanzos con gambas al ajillo,pasta lagrima con boletus,lubina salvaje con trompetas de la muerte, lomo de corzo con colmenillas, queso de cabra gratinado y soufle de chocolate salado). Excelente cristaleria Riedel y vajilla moderna. Buena carta de vinos cepas viejas dominio de tares 19 €.

Al ser la única estrella en un sitio en el que se como bien en todas las esquinas como es León, me esperaba algo más. Restaurante correcto en todo menos en el precio, que me parece un poco caro. El servicio es bueno y el lugar es un edificio con muchas escaleras y comedores pequeños.
No es de los más recomendables de la zona.