La paella con gusto a pastillas gallina blanca ,otra cosa que no puedo comprender es porque en algunos restaurantes se empeñen en añadir Pota-Canana que no se la come ni dios y no mejora el sabor en lugar de calamar o sepia a la paella marinera.
En cuanto a los vinos pedimos un Scala-Dei,Prior el cual tenia una temperatura demasiado elevada.El camarero al pedirle que si podia cambiar las copas (pretendia servir el vino en copas de agua y mala calidad) no se ruborizo al decir gruñiendo que solo cambio las copas en caso que se pida un reserva.
No volvere

Situado en la playa de Sant Pol, con buenas vistas a las playa. Comida basado en los productos del mar. Tomamos unas espardenyes, unas gambas salteados, uno ricos mejillones de roca, todo lo que tomamos muy rico.

En cuanto al vino tomamos un Viña Esmeralda (12,5€), la carta de vino con una pequeña selección de vinos por D.O. predominando las D.O.s catalanas. Las copas eras bastante mejorables, eran típicas copas cónicas de restaurante.

Algo ruidoso, ya que ese día estaba bastante lleno, aun así el servicio fue correcto.

Restaurante que regentan las familias Motas y Lozano, servicio esmerado y personal.

Excelentes productos marineros de entrantes probamos un paté casero de gran calidad, sepionas con la medida justa y en su punto, calamares a la romana son de los mejores que he probado en mi vida. Las anchoas son saladas artesanalmente por el cocinero Jose Lozano y los erizos de mar y las gambas saltan del plato.

De segundo plato tomamos una lubina a la plancha, pero en otras visitas a este mismo establecimiento hemos probado los diferentes pescados que nos presentan tanto al horno como a la sal y siempre has sido platos excelentes.

Los postres son caseros y los prepara con mimo La Dolors Motas.

Los vinos son correctos, ayer tomamos un Lagar de Cervera Albariño y lo presentaron con las copas y la temperatura adecuada.