Sigue como siempre. Cocina internacional con bastantes toques franceses; conservan sus platos de éxiti que repiten desde hace años (coquille Saint Jacques, sopa de cebolla, lenguados Meieur y con salsa de almendras, pato, entrecotte, etc.).
Releción precio calidad buena 30/40 €/P.
Carta de vinos más completa que antes, standard y a buenos precios.
El servicio del vino muy mejorado ahora, respecto a otros comentarios anteriores que he leído.
Anoche nos tocó una clientela muy bulliciosa, pero me consta que es un Restaurante muy tranquilo e incluso íntimo.
Si no se conoce, hay que hacerlo. Es un clásico desde que se inauguró con el nombre de Lionel hace ya...

Vamos desde hace unos quince años, tienen una carta fiel a sus clientes, creo que en cada restaurante uno tiene unos platos favoritos, aquí no te encuentras con sorpresas cosa que es muy de agradecer.
el ambiente, si uno tiene imaginación, puede trasladarte a un restaurante parisino, muy romantico, la luz es de destacar, no le hace falta que se adapte a los tiempos que corren, si uno busca un local minimalista los tiene de sobra, como este local no hay .
la comida, entrantes: setas, la brandada de bacalao, rebollones, habas con foie, los clasicos de toda la vida del chez. en cuanto a segundos el pato, tanto el confit como el magret, los mejores que hemos probado.
servicio profesional y amable, aunque sin excesos, que se encargan de ofrecer paco,angel, alberto y sara. extraordinaria relación calidad precio.

Ya tenía ganas de acudir a este restaurante situado en el centro de Valencia.
La verdad es que no nos defraudó en absoluto.
Cocina de corte mediterráneo con tintes afrancesados; buenos los entrantes , así como el confit de oca, mientras que el steak tartar simplemente correto.
Excelente servicio, muy cercano y recomendándote lo que necesitas sin intentar venderte nada.
Carta de vinos a unos precios excelentes, aunque las copas resulten claramente mejorables.
Buena relación calidad-precio.
Recomendable.

Restaurante de ambiente clásico y acogedor. Se nota el paso del tiempo en el local pero no molesta la pátina del tiempo.
En cuanto a la cocina es clásica, de corte francés y bien ejecutada. Falta prestarle algo de atención a la arquitectura del plato pero todo muy correcto. Destacaría el pato y correcto el steak tartar.
Carta de vinos mejorable, sobre todo en espumosos y copas algo groseras para disfrutar plenamente del vino. Servicio del vino casi inexistente. Sin embargo el servicio en general es bueno, amable y muy correcto.

En general me gustó, y la RCP solo se vio manchada por el precio de los cafés cobrados a 2,10€ cada uno. Hay que revisar ciertos deslices pero recomendable.

Restaurante de los que no decepcionan, para los que no les gustan las sorpresas ni en lo que llega a la mesa ni en la factura.
El local es pequeño y acogedor y en él se elabora una cocina tradicional con algunos platos excelentes.
Descatacaria los choricillos de ciervo, la coquille de marisco y el magret de pato.
Servicio correcto con un trato amigable, pero con algunos despistes. Servicio del vino correcto y copas claramente mejorables.
Buena relacion calidad-precio.

Tenia mucho interes en visitar este celebre y antiguo restaurante "frances" y efectivamente, me encontre con todo un antiguo restaurante falto tal vez de adaptacion a los tiempos que corren.No me cabe duda de que su encanto lo genera su maitre, totalmente profesional y muy amable, intentando esforzarse por enseñar el negocio a los dos jovenes camareros.La carta nada sofisticada, tampoco especialmente afrancesada, ni el foie es autentico, podian comprar al menos el mejor de las Añadas.Los entrantes calientes, salen frios y el Steak Tartare ni punto de comparacion con el Gastronomo, eso si, insisto en que su Maitre te hace "olvidar" esas carencias.La carta de vinos, pues con algunas buenas lindezas, pero me equivoque y opte por un Bordeux que estaba tan aguado como el vino de Asuncion.Sobre precio pues para todos los gustos mas menos 50€ pax.

Acudo a este entrañable sitio desde hace muchos años , es acogedor y romantico , la calidad de la comida muy buena , el trato del servicio excelente , la carta de vinos correcta y la relacion calidad precio muy muy buena.

Sin duda alguna, uno de mis restaurantes favoritos de Valencia... ¿Porqué? pues pienso que tiene la mejor relación calidad/precio que he visto.

Actualmente existe un menu degustación de 22 euros (vinos aparte) que se compone de una selección de entrantes de la casa (los choricillos de ciervo están increibles), un primer plato (teneis que probar la ’coquille’ de mariscos), un segundo plato (excelente el magret de pato con salsa de castañas y grosellas) y postre (tartas caseras, sorbetes...).

Un restaurante que dificilmente acabe siendo reconocido en guias gastronómicas debido a su poca evolución en la cocina. Siempre hacen lo mismo... pero si lo hacen de maravilla... ¿por qué cambiar?

Visita obligada.

Comida excelente. Trato fabuloso. Ambiente agradable. Relación calidad/precio de lo mejor que he probado en Valencia. Habitas con Foie, lenguado con almendras y pastel de queso, tres platos excepcionales. Las carnes no las he probado aún pero según nos comentó Paco (el maitre) son la especialidad de la casa.
Sin duda volveré y muy recomendable si se quiere disfrutar de una comida y servicio de calidad sin pagar barbaridades.

Coincido con los comentarios ya puestos por otros comensales. Tal vez el adjetivo que mejor define a este coqueto restaurante es encantador. Y es que a una comida digna, sin trampa ni cartón y de la que se va echando de menos cada vez con más frecuencia, hay que unir la personalidad de Paco, excelente maitre como ya quedan pocos, que tiene la inapreciable capacidad de hacerte sentir como en casa. En una casa cálida, acogedora donde apetece saborear las recientes adquisiciones de buenos caldos en unas copas (por fin!) a la altura de las circunstancias y todo ello con una relación calidad/precio donde llegan muy pocos. Lo dicho: encantador.