El gigante bodeguero Torres sigue en su lucha por reducir la contaminación en el proceso de elaboración del vino, tiene ya distintos proyectos enfocados a reducir las emisiones de CO2 como el primer tren turístico solar de europa o el proyecto de autoabastecimiento eléctrico de sus bodegas (este está parado por tramas burocráticas. Ahora se ha lanzado de cabeza en intentar aprovechar el CO2 que emite el vino en su proceso de fermentación y así reducir la huella de carbono de sus productos usandotecnologías de captación biológica y captación química como armapara combatir el cambio climático que afecta ya al sector vitivinícola por la subida de las temperaturas. Según Miguel Torres: El sector vinícola tiene en sus manos la capacidad de... |
Me llegan por varias vías una de esas noticias que te dejan boquiabierto…. Aunque por otra parte… si se pretende hacer un viaducto que cruce el Mosela en una de sus zonas...
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