La verdad es que fue más que un lujo, un honor, el disfrutar de estos vinazos de las manos de sus padres que los presentaban por primera vez todos juntos en sociedad.
No obstante, fue una pena que la dilatada experiencia de la entidad organizadora no sirviera para suplir la falta de ella de los guías, pues se habrían evitados algunos pequeños contratiempos que surgieron a lo largo de la cata, pero que en absoluto consiguieron empañar la excelente calidad de la misma.
Muchas gracias cariño ¿Listo para Enofusión?