Antes de leer tú fabulosa crónica estaba desayunando y comentando que tenía ganas de volver, de hecho estaba concretando una visita en septiembre. Me parece un buen lugar donde Juan está trabajando muy duro en los fogones y está evolucionando a pasos agigantados y Cristina lo está bordando en sala supervisando que todo va bien. Juan tiene mucho talento y es una persona entrañable. Es difícil no cogerles cariño.
Lo dicho, a pasar unas buenas vacaciones!!!