Fue un magnifico colofon Jon, ese restaurante me enamoró. El pan, junto con el de Yayo Daporta, el mejor de todo el periplo, una gozada. El albariño, cosa seria y fue por los pelos...era la ultima botella que les quedaba en la bodega. Las kokotxas, aun con "ch" estaban buenísimas, I'm sorry, no cometeré mas esta falta :-(
Ah, el chocolate estaba.... hummmmmmmmmmm
Hasta pronto, Jon
Un abrazo
Joan