Esos huevos con foie llenan un montón. Los pedí la última vez que estuve es vista de que son una de las especialidades de la casa y no acabaron de convencerme. Eso sí, no quedó nada en el plato. Creo que es preferible comerlo por separado: por un lado los huevos con patatas y por otro el foie a la plancha con esa salsa dulce con que se acompaña el plato. Ponerlo todo junto lo convierten en una combinación excesivamente grasienta, pero con un espumoso se arregla todo. Nosotros lo acompañamos con un champagne que vale infinitamente más de lo que cuesta, un Jacques Lasaigne (¿30? creo recordar). Saludos.