Te felicito por la fidedigna crónica de la grata mañana la pasada en Aranda de Duero. La mayoría de los vinos con calidad, 3 de ellos de altísima, y sin el maderazo a que nos tenían acostumbrado los Riberas. Y Mucha gente joven aficionada al vino que con devoción y silencio realizaron la cata. Lo del lechazo y más en Casa Antón, como dice Gabriel, será otro cantar.