De color marrón con reflejos verdosos, turbia y con gran cantidad de partículas que van sedimentando poco a poco en el fondo de la copa. La espuma nacarada es de aspecto jabonoso.
La nariz es intensa manifestándose de inicio los aromas herbáceos dulzones y melosos por el que se cuela el cereal con recuerdos de granero sucio. Al coger temperatura salen de nuevo dulces pero en esta ocasión más refinados.
En boca se muestra de cuerpo ligero a medio con un breve inicio neutro que abre paso a los amargos verdes, frescos, pulidos y de porte elegante. Buena persistencia. El carbónico está presente pero sin abrumar, equilibrado.
Mi más sincera enhorabuena a los maestros cerveceros que nos deleitan con sus productos artesanos. Cerveza Pale Ale que destaca por su armonía en nariz y su equilibrio en una boca moderada. Dominan los matices verdes y resulta un buen veneno.
No valoro RCP al tratarse de un regalo de un buen amigo.
De aquí! Valenciaanaaaaa!
En la cata de Paco Higón podrás ver parte de la historia.
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