Lo que más destaca de este aceite es la presentación, que te predispone adecuadamente para lo que encuentras en el interior de la botella. Botella blanca opaca de cuello largo, con etiqueta negra rectangular, de pequeño tamaño. Muy bonita.
A pesar de que no se valora el color en los aceites, cada vez más hay facciones del sector que se inclinan a comentarlo. En este caso nos encontramos ante un color amarillo oro, con reflejos verdosos. El aceite es traslúcido, ligeramente turbio, lo que demuestra ausencia de filtrado en el embotellado. En cualquier caso, este es un tema que no supone mayor o menor calidad en el aceite.
En nariz despliega buena paleta de aromas, de media intensidad y con un frutado maduro, con recuerdos a plátano, avellanas, flor amarilla, algo de cereal y ligeras sensaciones de kiwi. Son aromas maduros, que son preludio de lo que nos encontramos en la boca.
En boca es denso, amplio, con elquilibrio. No es picante, y presenta sensaciones maduras de nuevo, con un retronasal de kiwi.
Un aceite que es más para combinar en platos cocinados (aceite, verduras), que en ensaladas o crudo.
Para mi gusto personal, buscaría coger la aceituna de forma más temprana para buscar más notas verdes y algo picantes, que le dieran más viveza.
Aromas dulces con manzana, almendra, tomate en rama.
En boca con cuerpo, fruta y detalles de picante a la vez que salado sin molestar.
Color verde precioso