Picota oscuro de capa alta y ribete púrpura.
Nariz a fruta negra madura sobre un fondo ligeramente balsámico.
En boca sabroso y goloso, con un paso a fruta negra madura y algo de roja.
Sin saber las variedades me vino en mente la monastrell, ya que me recordó al Laderas del Sequé.
En fin, un vino con mucha fruta presente tanto en nariz como en boca, agradable y goloso, pero que con unas cuantas copitas basta, ya que puede cansar.
RCP excelente, ya que cuesta unos 5€.

P.D: 70% Garnacha, 30% Monastrell - 4 meses de crianza en barricas de roble francés

Color rojo picota de capa media. En nariz, fruta madura, compota de ciruelas y un ligero toque a tofe. La sensación licorosa, en un primer momento, oculta las notas subyacentes; a medida que el vino se abre encontramos una mayor variedad de matices: torrefactos, madera, balsámicos y un ligero punto floral.

Es un vino goloso, con una acidez y taninos muy equilibrados. La fruta de la fase olfativa se ve acompañada de especias y balsámicos que aportan un paso por boca marcado por matices picantes y aterciopelados. El final es medio-largo y a pesar del punto dulzón, no llega a empalagar.

No es un vino que añoraremos durante semanas pero sí la clase de vino que cumple a la perfección para acompañar una velada en buena compañía. Lo que seguro no olvidaremos es la relación calidad-precio; poquísimos vinos alcanzarán una ratio tan alta.

Rojo picota de capa media y ribete violáceo, su gruesa lágrima colorea sutilmente la copa.

Nariz de buena intensidad, plena de fruta roja y negra, recuerdos especiados muy marcados, agradables notas florales, guindas en licor, calizo y con algún recuerdo de fondo vegetal de leve intensidad.

Entrada suave, aterciopelado, buena acidez, maduro, algo goloso, tanino jugoso y dulce, nada agresivo. En esta fase la fruta se muestra más negra que en nariz, de buena madurez en forma de moras e higos. También se potencian los recuerdos florales de colores azules y violetas. Final de duración media pero agradable. Sencillo, pulido, bastante redondo e invita a seguir bebiendo.

4,45€
Picota brillante y juvenil de capa media-alta. Nariz de buena intensidad, inicio con notas de vainilla y pimienta para poco a poco ir expresándose más ampliamente, toffee, fruta negra madura, terroso, floral, jabón, balsámicos suaves, crema catalana, tostados, torrefactos y chocolate. La entrada en boca es potente, paso con la acidez equilibrada, tanino maduro nada agresivo, goloso, torrefacto, toffee, chocolate y vainilla. Final bueno, con elegantes toques amargos y dulces.
Un vino moderno, goloso, potente y bastante complejo.
85

Un vino necesariamente para compartir, que gusta sin paliativo al gran publico.Con grandes dosis de fruta escarchada, madura y negra, notas incluso de algarroba.Maderas caremelizadas junto a granos de cafe.
De trago mas que sabroso, con mismas sensaciones que en la fase aromatica ( fruta muy madura y sensaciones dulzonas ), esto no hace mas que darnos a pensar el trabajo de extraccion que se le a hecho a la uva pero, puede llegar a cansar tanta concentracion? Es posible que llegue a empalagar? Mejor que se comparta el vino.

VISTA: Vestido amoratado de alta capa luminoso y brillante. Con lágrima decidida y tintorera.
NARIZ: Potente. Muy frutal. Intensas notas de fruta negra jugosa, unas puntas de almizcle, tierra humeda y cálidas tizas. Higos negros jugosos.
BOCA: Entre con calidez y se vuelve más profundo en poco tiempo. Persistente. De textura jugosa. Un punto amargo muy elegante al final. La sensación de fruta es excelente. Moras, lilas e higos.

Me gustaría ver que puntuación saca este vinazo (en su categoria de corta crianza) en una cata a ciegas. Las sensaciones son de poderío y mucha fruta. Casi se mastica. Un diez en precio. Sin peros.