Desconocía la existencia de este Obscur (Marselan 50% y Monastrell 50%) de la bodega valenciana Los Frailes y decidí probarlo en el restaurante La Embajada por esa tendencia mía a probar lo desconocido y, desde luego, por las palabras elogiosas hacia el vino del jefe de sala de este restaurante. Después he leído en algún sitio que ésta del 2008 fue una de las primeras añadas de este vino bastante escasa en botellas.
Ya la etiqueta del vino llama la atención, con una creación del pintor de Alcoy Xavier Carbonell en tonos (no podía ser de otra forma) oscuros, rotos por el nombre del vino en blanco y lo que parece ser una flor roja. En la contraetiqueta versos del poeta Salvador Jafer. Bastante arte para empezar.
Visualmente Obscur 2008 se presenta con un rojo picota de capa media-alta, limpio y vivo, con un ribete violáceo brillante.
En nariz aparece intenso y complejo ya en los aromas primarios, con predominio de la fruta madura y notas de confituras. Muy goloso. La intensidad se mantiene y se hace más complejo tras mover la copa, apareciendo una sucesión de aromas, siempre con el fondo goloso de la fruta madura, como los tostados, el regaliz y especias como la pimienta negra.
La boca no desmerece un ápice la complejidad de la nariz, y encontramos un vino elegante, sedoso y con cuerpo que llena la boca pero de paso fácil y amable, manteniendo las sensaciones de ligero dulzor que ya mostraba en nariz. Los taninos están presentes pero bien equilibrados y el alcohol, a pesar de sus 14,5º, se muestra en su medida justa. Postgusto persistente agradable que invita a seguir bebiendo.
No puedo hablar del precio de este vino en tienda o bodega pero los 29 euros que pagamos en el restaurante bien lo merecen.

Color picota con borde rosaceo, capa alta , espejo limpio y lagrima lenta que tinta ligeramente la copa.
Nariz de buena intensidad, profunda y directa. Frutos rojos y negros en menor proporcion destacando sobre especies, tostados, minerales , vainilla y más al fondo los lácteos
Paso por boca redondo, sin aristas , equilibrado, goloso , sabor frutal intenso , sedoso y elegante. No se notan para nada los 14, 5 grados de alcohol. Invita a seguir bebiendo y cada paso por boca es seda con sabor elegante y potente

Postgusto medio-largo.
Me ha encantado este descubrimiento