Añada excesivamente delicada, que debe explotar con un tiempo de botella.

Comentario

Rafael Palacios ha conseguido don As Sortes y Louro do bolo quitarse la impronta "hermano de", para pisar con nombre propio de forma sobresaliente. Hoy en día hablar de As sortes es sin duda hablar de terruño, un vino de corte mineral nacido y elaborado para evolucionar con la guarda, concepto poco cultivado en nuestro país. En esta ocasión me he encontrado con una añada que necesita tiempo para expresarse, que a día de hoy la Godello si bien se muestra en plenitud de intensidad en nariz, es en su boca donde solicita tranquilidad.

Cata y armonía

Visualmente aparece atractivo con sus tonos amarillo oro. En Nariz despliega un abaníco de buena intensidad donde prevalecen su carácter mineral, aunque este 2007 aparece más lleno de fruta, con aspecto maduro y toques exóticos de piña, buen acompañamiento de las notas de roble -tostados finos y ligeros vainílicos-. En Boca demuestra un gran equilibrio entre untuosidad y acidez, resultando denso a la vez que fresco, aunque aún con aristas ácidas que necesitan botella para redondear la boca. Un vino que en uno o dos años dará muchas satisfacciones, un gran vino blanco. El Maridaje que tenía en mente hace bien tiempo, resultó más que sobresaliente, a base de unas setas "Boletus Edulis" cortadas en rodajas a la planca con aceite y sal. Rebajó la acidez del vino y le aportó frescura a la seta, aunando el caracter terroso de ambos, una delicia.