Qué maravilla de vino...ligero y fresco, pero con una estructura y una cantidad de cosas que contar...Lo tomamos como acompañamiento de distintos platos de pasta en el restaurante de cocina italiana "Numa Pompilio" y fue un magnifico partner, sobre todo para los platos con tomate, con esa acidez en su punto y esa frescura que limpiaba y preparaba la boca después de cada sorbo y antes de cada bocado. Lo que hacen Álvaro Palacios y su equipo es de un mérito increíble, sacar lo mejor de cada terroir, de cada zona y adaptarlo a lo que el mercado busca y valora...Es un vino para tomar muchas veces en muchos contextos diferentes...no defrauda, y a un precio súper competitivo.
Rojo picota con ribete granate. Nariz primaria e intensa, pero con un claro pie puesto en la crianza. Despliega aromas de frutillos rojos frescos, matices vegetales envueltos en la frutalidad y bajo un perfil cremoso que limita con la golosina y lo medicinal. Hay sensaciones florales, lácticas, de tierra ( barro ), incluso en su final sigue apareciendo el hueso frutal que también recuerda a lo mineral y a las maderas utilizadas en su crianza con su tueste cremoso. En boca es muy rico, fresco, frutal ( pastel de arándanos en el horno y zarzaparrilla ), equilibrado, suave en el paso, con fruta roja madura ( fresones ) en todo el recorrido. Posgusto de buena dimensión, cierta sensación vegetal tostada propia de los hollejos de la uva tinta, aspectos que se perciben por vía retronasal. En su final sale nuevamente la pulpa cercana al hueso ( ciruela y melocotón ) y su sapidez tostada. Un vino estupendo dentro de su dimensión y enfoque, con una fruta muy viva, explosiva y sápida, con una crianza muy bien adaptada al resultado final. Seguro que estará mejor con unos años más en botella ( pero no muchos más ) aunque ese no sea el objetivo de este rico vino. Nos volveremos a interesar aún más por los vinos de la llamada Rioja Baja, ya que fruta, madurez, sapidez y equilibrio no le van a faltar, sobre todo a los que tengan buenas viñas, en este caso mayoritariamente de Garnacha. La elaboración hay que adaptarla a la uva que tienes y sacar al mercado la mejor interpretación de ello. Creo que Bodegas Palacio Remondo lo ha conseguido hacer perfectamente con este rico vino.
Visual rojo cereza picota capa media
Nariz Frutos rojos, especiado, monte bajo, cedro, envolvente.
Boca: aterciopelado, fresco, tanino integrado, frutos rojos, algo de cacao...
Muy rico
La Montesa 17
De color cereza picota y capa media baja.
La nariz es de buena intensidad, fresca, marcadas notas de fruta roja, monte bajo, toques florales, balsámicos y ligera crianza bien integrada.
En boca tiene buen ataque, muy buena acidez, sedoso, fino, taninos elegantes, de paso ligero lleno de matices y de final de gran persistencia. Retrogusto lleno de frescura.
Un gran vino para su precio.
Utilizamos cookies propias y de terceros con finalidades analíticas y para mostrarte publicidad relacionada con tus preferencias a partir de tus hábitos de navegación y tu perfil. Puedes configurar o rechazar las cookies haciendo click en “Configuración de cookies”. También puedes aceptar todas las cookies pulsando el botón “Aceptar”. Para más información puedes visitar nuestra Ver política de cookies.