Y diez meses después volvemos sobre este vino en el mismo restaurante. Estamos con mi esposa mano a mano y nos lo ofreció nuestro buen amigo el Chef Giovany. Lo sacó atemperado de su vinoteca a 16°C.

VISUAL: Presenta un bonito color rojo picota de capa media con el ribete en tonos cardenalicios. De lágrima abundante, fina y transparente (88).

OLFATIVA: A copa parada mantiene esos intensos aromas de fruta roja fresca, a frambuesa y fresa. En movimiento aparecen fragancias florales de rosas rojas, notas vegetales de pimiento verde, especiados de pimienta blanca, apuntes balsámicos de eucalipto con un fondo de guindas en licor y sutiles recuerdos de ebanistería fina. La intensidad es media y su complejidad notable (88).

GUSTATIVA: En boca sigue vigoroso y fresco, con una gran acidez y con los taninos marcados, menos verdes que en febrero pero presentes. El paso por boca sigue siendo seco, desprendiendo frescos aromas retronasales de frutos del bosque. El post-gusto se nos antoja tánico y licoroso, con un fondo sutilmente amaderado. La persistencia nos sale de dos minutos y 40 segundos. Para tomar fresquito, por debajo de los 15°C mejor, y rebajar así las marcadas sensaciones alcohólicas. Un vinito con recorrido todavía, si mantienen en el restaurante esta misma añada lo iremos siguiendo (86).

La RCP la mantendremos en muy buena.

MARIDAJE: Nos lo tomamos acompañando un entrante de almejas salteadas en salsa de langostinos y después un plato fuerte consistente en un arroz "Le Petit Jardin", con arándanos, nueces, cerdo y servido con pechuga de pavo rostizado y pierna confitada. Espectacular el maridaje con ese suculento arrocito pues sus intensos sabores grasos y cárnicos armonizaron a la perfección con las frescas notas frutosas y licorosas de nuestro vinito. Una delicia de velada con mi amada esposa.

Salud-os!!

Vemos este vino francés en la carta de uno de nuestros restaurantes preferidos de Cuenca (EC) a un precio razonable, así que nos lo pedimos. Tenían la botella atemperada en su vinoteca. Nos la abren y sirven a 16°C.

VISUAL: De color rojo picota muy brillante, de capa media con un estrecho ribete violáceo. De lágrima abundante, fina y ligeramente tintada (86).

OLFATIVA: A copa parada es eminentemente frutoso con aromas de moras, grosella y arándanos frescos. Al agitar desprende fragancias florales de rosas rojas, vegetales de pimiento verde y especiados de pimienta blanca y vainilla. De fondo notas a cacao en polvo y un puntito amaderado muy sutil. Intensidad media con los matices bien perfilados (87).

GUSTATIVA: Posee un buen ataque, acidez media con los taninos un pelín verdes todavía, jovencito. Paso por boca de cierta astringencia, seco y de amplitud media. Los aromas retronasales son de frutos del bosque y algo de vainilla. Post-gusto de cuerpo medio, con notas cítricas de ralladura de naranja y ciertos toques amaderados (al parecer tiene algo de crianza, unos meses al menos... eso creo vamos). Persistencia de dos minutos exactos. Un vino notable que quizás mejore con un par de añitos en botella (86).

La RCP la considero muy buena pues veo que en tiendas se encuentra por unos 6.50 euros.

MARIDAJE: De entrante nos pedimos una berenjena rellena de queso y pesto y luego unas ancas de rana amazónica en salsa de tamarindo. El plato fuerte fueron unos T-Bone de cordero sobre cuscús. Destacar el maridaje con los jugosos T-Bone pues las notas frutosas y ese puntito amaderado de nuestro burdeos armonizaron maravillosamente con los sabores sanguíneos y cárnicos del corderito. Muy rico!!

Salud-os!!