Dies meses después volvemos con este verdejito a ver su evolución. Lo tuvimos en la nevera un rato, lo sacamos y servimos a 11°C para su valoración.

VISUAL: Presenta un color amarillo más evolucionado que hace 10 meses, precioso, con tonalidades doradas muy elegantes. Presenta una escasa lágrima, gruesa y transparente (93).

OLFATIVA: En nariz asoman notas frutales de plátano y mango con recuerdos de ciruela blanca. Ha perdido algo de su carácter floral y se nos antoja más herbáceo con recuerdos de hierba luisa y tomillo. Al final apreciamos unas sutiles notas especiadas avainilladas muy golositas. Su intensidad es media. Sí se aprecia una ligera evolución a nivel olfativo en estos 10 meses (88).

GUSTATIVA: En boca se muestra cálido, con una acidez comedida lo que le proporciona una gran elegancia. Amplio y envolvente, con un paso por boca delicioso, seco y fresco transmitiendo aromas retronasales herbáceos y de fruta blanca. En el post-gusto una delicia, notas de fruta tropical (mango y maracuyá) con apuntes de pimienta blanca, notas de membrillo y con un atisbo amaderado de fondo. La persistencia es de 2 minutos y 10 segundos. Nos ha encantado y es obvio que mejora a pasos agigantados en botella. A ver si me agencio unas botellitas más para probarlo en años venideros (90).

La RCP la mantendremos en muy buena.

MARIDAJE: Formó dueto con un J.P. Chenet chardonnay y nos lo tomamos con un aperitivo de jamón y embutidos ibéricos y después con un caldoso de mariscos. Excepcional maridaje con el arrocito, sensacional simbiosis entre las notas herbáceas de nuestro verdejito y las notas salinas del caldoso. Una delicia!

Salud-os!!

Celebramos el cumpleaños de mi esposa y estamos en una cena maridada en el restaurante "El Mercado" de Cuenca (EC) y elaborada a cuatro manos por los cocineros Samuel Ortega (pasó por el Celler de Can Roca y por el Bulli, ahora propietario del Shamui Espai en Saraguro, Ecuador) y Daniel Contreras (chef en el Dos Sucres en Cuenca, Ecuador). El primer vino que nos ofrecen es este blanco de Rueda, curiosamente español, con un leve paso por barrica. Tienen las botellas atemperadas y nos sirven en copa a unos 9-10°C.

VISUAL: De color amarillo pálido con tonalidades verdosas, brillante y cristalino (86).

OLFATIVA: Asoman variados aromas frutales a melocotón, maracuyá y mango acompañados por notas de flores blancas. También presenta apuntes herbáceos (grama recién cortada) y un sutil recuerdo especiado de pimienta blanca. Más que aceptable complejidad y de intensidad media (87).

GUSTATIVA:  Nos encontramos un vino con carácter, fresco y de alta acidez. Paso por boca untuoso, lácteo y amable. Retronasal con mucha fruta (manzana verde y melocotón) y post-gusto cítrico con notas de ralladura de lima y un final con un toque de pimienta sutil y elegante. Persistencia de un minuto y 50 segundos. Verdejo de calidad, fresco y equilibrado (87).

La RCP atendiendo a su precio en España (7-8 euros) la considero muy buena.

MARIDAJE: Este primer vino acompañó un delicioso ceviche de atún blanco con encurtidos de cebolla y pimiento. Exquisita combinación de apuntes marinos y ácidos del ceviche con las frescas notas herbáceas y cítricas de nuestro verdejo. Qué rico!!

Salud-os!!

Amarillo medio, limpio, brillante, borde acerado. Nariz con flor de acacia, albaricoque, tomillo y laurel, muy envolvente. En boca entrada dulce, amable, con fruta blanca, pera conferencia, hinojo, cebolleta, laurel y anís. Final medio-largo, bastante complejo. Entre los mejorcitos Ruedas de gran producción.

Porque es que nos sigue danod mucho placer por un precio contenido.

Si es que sigue en muy buena forma con esa nariz tan frutal, floral y vegetal, con un punto más de madurez y dulzura, pero con mucha frescura aún en el conjunto. Es una nariz elegante, con presencia y un toque mineral interesante, que además se complementa con notas cítricas muy suaves.

La boca es untuosa, muy frutal, con una excelente acidez y esas florecillas y notas de hinojo pululando por la boca. Ligeros anisados y balsámicos, buenos amargores y esa mineralidad que se nota en el retrogusto.

BUen vino que no me canso de beber.

Una verdejo maravillosa, pura, fresca, bien tratada y de calidad. Así lo resumiría.

Y es que con esa nariz con hinojo, flores, fruta tropical, herbáceos, fruta blanca, mineralidad... notas que estás ante un vino serio, fragante y elegante. Un vino sabroso y que te presenta una buena verdejo.

En boca tiene una acidez afilada, con esa fruta blanca mandando, con pera y manzana por delante. La acompañan fruta tropical, flores, hierba recién cortada, menta, mucha frescura y un toque mineral sápido. Tiene muy buenos amargores, frescura, ligeros anisados... Es largo y floral, elegante y con una buena estructura.

Me gustan los verdejos de esta casa. Tendré que ir a por el Montico