Collina Rionda es quizá la mayor rareza del maestro Giacosa, pues tan solo se producían unas 6000 botellas del Barolo “annata” y algo menos de 1000 del riserva y porque procede de la que quizá es la mejor viña histórica de Serralunga, era por tanto el Barolo que más ganas teníamos de probar. Y a fe que respondió.

Rubí con ribetes rojizos, capa media. Nariz de media intensidad que sorprende por su limpieza desde un primer momento. Notas florales, rosas sobre todo, frutos rojos maduros y en licor, chocolate negro, especias más hacia nuez moscada, tabaco, ahumados, ciertas trazas de hojarasca y humus, tierra mojada. Nebbiolo de manual. En boca está en su momento ideal, fantástica acidez, paso redondo aunque con sus ligeras aristas, final de marcada longitud que deja recuerdos de frutas en licor con un tanino todavía presente pero con la elegancia propia de los grandes vinos del maestro. Persistente.

Un Barolo absolutamente perfecto en todas sus fases, en un momento de consumo ideal con sus 31 años, pero que sin duda tiene cuerda para rato en botella. Con ese plus de elegancia de los vinos de Giacosa. No nos imaginamos cómo podría ser la versión riserva. Uno de los grandes tintos del año, aunque por desgracia casi irrepetible.