Tiene color rojo picota, capa media alta, ribete violáceo y lágrima glicérica.
En la nariz predominan las notas de la crianza en forma de una madera muy elegante, suaves barnices, especias y balsámicos de regaliz negro. Tiene presencia de fruta roja y negra, encontramos notas terrosas y un toque metálico. Con oxigenación se subraya la ciruela negra y aparecen sutiles ahumados y hierbas aromáticas.
El ataque en boca es tánico, potente. Tiene brío y viveza, buena acidez y sabor a fruta negra, regaliz negro y especies variadas.
Por la progresión que mostró en la cata, consideramos que el vino tenía aún recorrido y recomendamos su decantación o consumo sin apresuramientos.

El vino Antona García 2012 tiene color rojo picota con alguna transición a tonos parduzcos.
Nariz de alta intensidad en la que la madera cobra protagonismo con notas lácteas, especias, tabaco rubio, barnices agudos y marroquinería. La fruta asoma con tiempo de aireación.
En boca contrasta un tanino muy vivo con un tacto sedoso, los sabores te llevan al bosque con sus moras, grosellas y arándanos, también está presente el regaliz negro que da profundidad a una boca que aunque por pulir, resulta atractiva.

Color rojo picota capa media alta con reflejos con algo de evolución (pero menor de lo esperado para su edad, por lo que su carga de polifenoles inicialmente debió ser tremenda). Presenta una lágrima abundante, grande y con caída lenta lo que indica que posee buena carga glicérica.

En nariz predomina de inicio la madera "viva", un toque suave a barniz, con especiados y balsámicos, fruta roja e incluso negra junto un toque de tierra mineral y maloláctica.

En boca reproduce la nariz, con un tanino intenso, vivo, carnoso, junto a un retrogusto balsámico y ligero amargor (raspón?) pero con una persistencia larga.

Probablemente tras decantación el vino pase de la rudeza a la complejidad.

Un vino que pide CARNE con mayúsculas.

Picota con ribete violáceo, capa media alta.
nariz de media intensidad, donde predominan las notas aportadas por la crianza, maderas finas, ligeros barnices, especiados y un punto a fruta negra y terrosidad cuando oxigena.
En boca tiene un ataque potente, como en nariz presencia de madera con un ligero toque astringencia, buena acidez, tanino presente, con notas a fruta negra y especiados.
Le queda botella o bien como dice Javi, decantar.

Visual:

Picota con ribete violáceo, capa media-alta y lágrima glicérica.

Olfativa:

Nariz con especial presencia de una madera muy elegante. Lácteos, barniz, ligeros tostados, hoja de tabaco y especiado. Con movimiento sale la fruta negra, el fondo es fresco, ahumados, laurel, ciruela pasa, regaliz negro y cárnicos.

Gustativa:

La madera se acentúa, es tánico, con bastante fruta negra, regaliz negro, potente, envolvente y persistente. Le falta botella para suavizar ese tanino que seca tanto la boca.

- Mi nota de cata en este instante es de 8. No obstante después de hacerle el vacío y volver a probarlo a los 3 días, el vino está más rico y fino, suavizándose en lo referente a aromas secundarios y terciarios, y dando especial protagonismo a las características de la variedad. Tengo ganas de volver a probarlo y darle el tiempo que creo que se merece, incluso mejor decantarlo.

Color rojo picota con reflejos violáceos y capa media-alta.
En nariz es completo e intenso por su marcada madera. Aromas a chocolate, barniz, pasas, especias (pimientas marcadas) acompañados de fruta negra intensa al final. Muy fragante.
En boca tiene un tanino muy marcado e intenso, buena acidez y cuerpo, algo astringente y muy persistente. Quizá le falta pulir un poco, pero tiene potencial.

De capa media y color rojo picota. Brillante y limpio.
En nariz destaca la madera. Presente aromas a tabaco, lácteos, fruta roja madura y toques balsámicos.
En boca es un potente, con cuerpo y tánico.