Me resulta imposible resistirme a la religión de los priorat. Como los Chateneuf-du-Pape, estos vinos, en sus grandes versiones, tienen algo de telúrico, misterioso, hondo, difícilmente descriptible, y que sin duda tiene que ver con su particular terroir. Con sus excesos y sus pequeñas imperfecciones, siempre son vinos de verdad, honestos y apasionantes. Este Mogador empezó mostrándose como un adolescente salvaje e impertinente, con esa fruta negra explosiva al borde de la sobremaduración, casi oportorizada, licorosa, y con una potencia que apenas podía domar su intensa mineralidad. Pero con el paso del tiempo el adolescente se calmó, la fruta se hizo más nítida y elegante, la tierra y el mineral se pusieron a trabajar y el vino entró en esa fase emocionante, profunda. En boca el vino hizo el mismo viaje. Acabó comportándose con exquisita elegancia, con su natural potencia mediterranea y su proverbial hondura. Vino con alma, con terruño, con misterio. Muy grande.

Esta botella si que aporta buena vibraciones. Decantado 150 minutos. Cereza oscuro, con ribete púrpura. Capa alta. Brillante. Aroma a frutos negros, chocolate, laurel, romero, tabaco, notas balsámicas y un buen fondo mineral. Nariz muy intensa y compleja, espectacular. En boca es seco, con buen cuerpo. Gran expresión de fruta muy madura, con apuntes balsámicos y notas achocolatadas. Amplio, cálido y sedoso, con gran estructura y mucha personalidad. Madera integrada y buena acidez en un conjunto maduro, sabroso y equilibrado. Potencia y finura aunadas. Final muy frutal, con intensas notas balsámicas, muchas hierbas de monte, cacao y recuerdos minerales. Buena persistencia. Estupendo.

(Botella MAGNUM). Picota cubierto con reflejos violáceos. Resulta muy expresivo des un principio, con una nariz intensa y atractiva en la que hay magnífica fruta, sutiles recuerdos animales, tostados enmarcando las sensaciones olfativas, suaves recuerdos minerales (pizarra, carbón vegetal) y notas tostadas de la barrica. En boca está realmente magnífico, con carácer y potencia, armonioso, equilibrado y sabroso. Con notable frutosidad, una excelente acidez y un recorrido largo.

Picota de capa alta, ribete granate, brillante y limpio cual espejo. Lágrima lenta y algo tintada.

Aromas muy intensos, elegantes. Recuerdan a maderas resinosas (muy bien integradas con el resto del conjunto), aceites blasámicos, fruta muy madura de fondo, tonos florales (geranios), tierra húmeda y regaliz.

Estructura perfecta, con gran potencia. Untuoso y cálido, un vino voluminoso, carnoso. Aun un pelín astringente. Retronasal mineral. Larga persistencia, con postgusto a palo de regaliz y café.

Abierta otra botella esta vez en compañía un tanto bulliciosa. Decidamente este vino debe ser tomado en compañía de uno mismo y muy seleccionada.
Esta vez mostró una enorme gama balsámica y en boca sigue dejándome anonadado.
Habrá que ir con cuidado con las botellas que me quedan. Me asalta la duda de cual prefiero sin el 2000 o el 2001. Los franceses lo tienen claro a favor del 2001 pero yo no acabo de decidirme. No vuelvo a puntuar por que casi ya me da vergüenza.

Otra botella decantada 5 horas antes, presenta idéntico color que la anterior y asimismo una nariz intensa y compleja, en la que, aparte de las notas ya descritas, están muy presentes balsámicos (mentoles, eucaliptus) y la fruta presenta síntomas de sobremaduración. En boca es seco, amplio, carnoso y sedoso. Muy buena textura. Fruta muy madura y mucha madera, aunque personal y de excelente calidad. Destacada astringencia. El conjunto es sabroso y inicialmente bien compensado, pero conforme avanza la botella muestra su cara más pesada y cansina, aunque sin llegar a avasallar ni aturdir. En el límite. Final algo corto, donde la fruta queda ahogada por notas alcohólicas, con muchas hierbas aromáticas, café y algo de regaliz. Aunque se ha dejado beber con cierto placer, esta botella no presenta la profundidad y armonía que recuerdo de la anterior y ahora mismo se me antoja un vino sobrevalorado. Veremos que pasa con la siguiente.

Picota de capa alta con ribete poco evolucionado.
En nariz se muestro mas cerrado que hace cinco meses.
Mas animal(mucho cuero) y especiado y caliente menos complejo.
En boca carga frutal impresionante.
Final potente y largo.
No puntuo porque esta dormiendo (para algunos años...)

Vino huraño a la hora de desarrollar aromas. Si se tiene paciencia la recompensa es segura. Cereza picota con ribete cardenalicio, capa alta, lágrima lenta. Menos fruta que el Vall Llach o el Dofí de la misma añada pero aromas más complejos. En boca se muestra potente, llenando a cada sorbo, pero equilibrado y goloso. Gran final

Cereza picota con ribete cardenalicio, capa alta, lágrima lenta. Alta intensidad aromática con notas minerales, lácticos (mantequillas), fruta negra y roja en licor, recuerdos a cueros y ciertos aromas a frutos secos. En boca se muestra potente, llenando a cada sorbo, pero equilibrado y goloso. Gran final

Cereza Picota oscuro, ribete morado.
En nariz café, aromas lacteos , menta, regaliz, licores.
En boca parecia solido, masticable, sabroso, complejo, redondo, notas de frutas maduras, excelente estructura tánica, agradable, dulce, sedoso... con gran volumen y vinosidad. Largo, muy largo, tan largo que al dia siguiente de la cata aun persistian sus caracteristicas en mi paladar. Es un vino complejo , para relajarse y pensar. El Rey de la velada. Y acogiendo la frase de Joan de la Peña La Taberna “;Un verdadero camaleón”;.