Vino y saludo y ahora en colores

Por aquella época no sabía yo que compraban la energía a cinco veces su precio en el mercado que si no...

Manhattan es una islita que queda en la costa de los Estados Unidos de Bush. Aquí somos muy distintos... Los que comen la basura esa de la que hemos estado hablando no son tan notorios. Es más, cuando ves por estos rumbos una de esas mujeres con ocho rodillas, o uno de esos tipos con panzas imponentes, tienden a ser turistas venidos de tierra adentro, no neoyorquinos.

Aquí se come muy bien...

M.

...La victoria de Bush. Hace unos meses estabas deprimido y querías irte a vivir a Europa. Ahora veo que la solución ha pasado por llegar a la conclusión de que no vives en un estado más de Estados Unidos sino en otra cosa. Y eso sin pagar psicólogos. Brillante reacción de auto-defensa! :-)

Entre mis excesivos estudios hubo una cantidad desmoderada de horas dedicadas a estudiar a Freud y Lacan. Casi me hago psicoanalista. Pero resistí la tentación.

MI nueva manera de ver a Manhattan (ojo, que no incluyo al estado de Nueva York entero, porque hacia el norte vive gente por la que no puedo dar fe), que después de todo votó de forma arrolladora en contra de Bush, tiene que ver con subvertir el superego, darle un ";upgrade"; al ego y hacer lo que me da la gana. Lo bueno es que tengo vuelos directos a cualquier parte del mundo mundial y puedo saltarme todo el resto de Bushlandia, con la que no entro en contacto en lo absoluto.

M.

Porque jamás he pisado esos lares, la verdad es que sí tengo ese sentimiento de aldea de irreductibles galos en Manhattan, a decir la verdad creo que la culpa la tiene mi idealizado Woody Allen y sus películas. Creo que un tipo así no puede adorar de esa manera EEUU, pero sí ama a una ciudad que parece salir del tópico general norteamericano.

Lo que te muestra Wody Allen es Nueva york. Yo que vivo aquí, te digo que todos y cada uno de sus lugares y personajes han existido o existen en esta ciudad. Pero Nueva York también es muchas otras cosas. Siempre he creido que Estados Unidos, con tanta moralina y principio barato, promete mucho. Te hablan de diversidad, de oportunidad, de acoger a todo tipo de gente, no importando su origen... Sin embargo, creo que en Nueva York es el único sitio en que esas promesas se toman en serio. No es que se cumplan completa y tajantemente, sino que por lo menos hay más posibilidad de que se cumplan. Aquí coexiste y se desarrolla todo lo que puede dar la humanidad, créeme. Es un lugar de mucho fermento creativo, de mucha energía... Claro, tiene sus pegas, pero al final yo no te la cambiaría por ninguna otra ciudad del mundo.

M.

El respeto, la humildad, la honestidad, la generosidad, el valor... ¿Qué tal se dan por esos lares?

Saludos.
Jose Ángel.

Me refiero a lo del ";valor";. Vamos, que decir que el ";valor"; es un valor me parece un poco innecesariamente retorcido. Si hablamos de coraje, valentía, etc., hay que matizar muy bien las cosas. Los policías y bomberos que entraron corriendo a salvar gente ante la inminente caida de las torres gemelas eran indiscutiblemente gente muy valiente. Y honesta, y generosa, pues dieron su vida pro el prójimo sin reserva laguna.

El problema con la valentía es que a veces se confunde con mera estupidez y ceguera. Por ejemplo, la cantidad de gente que va a guerras estúpidas y pierde la vida. Vamos, ¿es eso un valor?

En cuanto al respeto: Pues te parecerá mentira, pero esta es una ciudad de gente muy respetuosa. Te dan la oportunidad de decir lo que tienes que decir. Si están en desacuerdo contigo, te lo dicen. Si les insultas, te parten la cara. Yo le llamo a eso respeto al derecho ajeno y voluntad de ofrecer reacción proporcional.

En cuanto a la humildad: Aparte de que vivamos en la ciudad más increible del mundo y estemos muy orgullsos de ello, pues... Bueno, okey, la humildad no se nos da tan bien. Pero cuando se es como somos y se vive como vivimos, ¿qué importa eso?:-)

En cuanto a la generosidad, creo que aquí me he encontrado con la gente más generosa que he conocido en ninguna parte. Muchos nuevos amigos me han abierto sus casas, me han desplegado una hospitalidad a veces casi sobrecogedora... Casi sin conocerme. Y cuando la ciudad ha visto una catástrofe (como el 11 de septiembre del 2001), la gnete ha sido más que generosa con us tiempo, su energía, su dinero... Recuerdo aquel gran apagón. Tal y como nosotros lo hicimos con compañeras de trabajo de Josie, muchísimos vecinos de Manhattan abrieron las puertas de sus apartamentos a gente que en realidad eran solamente o colegas de trabajo o meros conocidos, si estos no podían irse a sus propias casas a cuasa del fallo del transporte público.

No sé a qué viene tu pregunta, pero creo que esta es una ciudad que moralmente no adolesce de casi nada. Y encima caminas ocho cuadras y oyes veinte idiomas diferentes...

Pero ya, el spot publicitario de la Gran Manzana se acabó...

M.