Pues sí, el vino nos ha llevado de vacaciones al sur de Francia y la verdad es que nos ha encantado.
Pues sí, el vino nos ha llevado de vacaciones; este año al sur de Francia y la verdad es que nos ha encantado. Las zonas han sido el Rosellón-Languedoc y Midi-Pyreness. Estas zonas del sur son más bien poco valoradas por los franceses y muy dedicadas al vino de granel pero dentro de ellas se pueden encontrar vinos de muy buena relación calidad-precio y también nos hemos encontrado con varias sorpresas.
En primer lugar se nos ha abierto un mundo, nunca nos habíamos planteado ningún tipo de clasificación de los vinos, el vino y punto. Pues bien, preparando este viaje, disfrutamos tanto de la preparación como del viaje en sí, nos dimos cuenta que se elaboraban unos vinos muy especiales, los vinos dulces naturales, unos vinos fortificados y a partir de aquí se podría establecer un debate sobre estas clasificaciones pero ya hay hilos en verema en este sentido y tampoco es nuestra intención. Nos gustaría aprovechar la ocasión para recordar el hilo en el foro donde se nos ayudó a preparar el viaje y sirva así de agradecimiento a todos los que nos ayudasteis a decidir las bodegas y a diseñar el viaje: https://www.verema.com/foros/foro-vino/temas/1293820-bodegas-zonas-midi-pyrenees-languedoc-roussillon.
Decidimos visitar dos bodegas, una en cada zona, Mas Amiel en el Rosellón-Languedoc y Chateau du Cedre en la zona de Cahors (Midi-Pyreness). ¡Adjunto unas fotos!
Las tres primeras son de la bodega Mas Amiel, se elaboran bastantes vinos en esta bodega, agradecer el trato, las explicaciones en inglés que eso en Francia no es fácil y la oportunidad de probar todos los vinos de la gama. De entre los vinos tranquilos (blancos, rosados y tintos), nos llevamos una botella de blanco ALTAÏR, un coupage de una única parcela de las variedades garnacha blanca, garnacha gris y macabeo. Luego nos llevamos 3 botellas de vinos fortificados, que en resumen son vinos donde se ha añadido alcohol vínico antes de terminar la fermentación quedando así azúcar residual, son los llamados vinos dulces naturales. Nos llevamos el Muscat, uno brutal monovarietal de garnacha gris (estábamos muy interesados en probar esta variedad) y finalmente el de crianza oxidativa de 30 años. Este último, si os fijais el la foto con damajuanas a la intemperie, el vino se fortifica y se deja así durante un año, la evolución del vino en estas condiciones equivaldrían a unos 4 años en bodega, luego se afina un año en depósitos de cemento y luego ya van en grandes foudres para su crianza, nos compramos la de 30 años. Las dos últimas son del Chateau du Cedre, bodega de la zona de Cahors, esta es la zona originaria de la variedad Malbec que ha popularizado sobretodo las bodegas Argentinas. Nos compramos el Le Cèdre 2011, otra vez agradecer el trato y los excelentes vinos de zona. Finalmente adjunto una foto de las 12 botellas que llevamos para casa, allí nos bebimos unas cuantas/bastantes más, podreis ver los vinos de las bodegas comentadas y algunas curiosidades que luego os comento.
Empezemos con las curiosidades, a la derecha un espumoso hecho con uvas pasas de solo 3 grados de alcohol que tomaban como aperitivo. Hablando de espumosos, pudimos probar el Blanquette de Limoux método ancestral. Se dice que fue el primer espumoso del mundo y luego fue Pierre Perignon quien importó el método a la Champaña. El método ancestral es con solo una fermentación, se tapan las botellas antes de finalizar la fermentación alcohólica y así el CO2 creado queda en la botella pero no hay una segunda fermentación en botella como suele ser habitual en la elaboración de este tipo de vinos. También pudimos comprar botellas de zonas cercanas y que aquí són difíciles de conseguir, adquirimos una botella de Monbazillac, vino de la zona más occidental cuya elaboración es la misma que los famosos Sauternes, es decir son vinos naturalmente dulces que se elaboran a partir de uvas con botritis noble. Finalmente pudimos acceder a dos botellas de la zona del Jura y con elaboraciones muy especiales. Podreis identificarlos facilmente en la foto. En primer lugar un Vin du Paille, literalmente vino de paja, se ponen las uvas a pansificar en unos cestos de mimbre con paja y luego se hace el vino. Y para rematar un vino muy diferente, un vino con crianza biológica, bajo velo de flor, igual que los vinos de Jerez pero con algunas particularidades, un vin Jaune del Juna (vino amarillo), tiene algunas diferencias con respecto a los de Jerez ya que son de añada, no hay crianza en soleras, tienen una crianza de 6 años y tres meses, no estan encabezados (alcohol añadido)... un vino muy especial. En resumen, del viaje enológico nos quedamos con tres cosas, en primer lugar las diferentes elaboraciones, vinificaciones, tipos de vino... luego con respecto a Francia me dió la sensación que vamos por caminos diferentes, aquí la tendencia es la de agruparse para tener más fuerza frente a un mercado globalizado y allí tuve la sensación de que cada pequeño territorio tenía la tendencia de intentar diferenciarse del resto, lo que da lugar a una multitud de DO que uno acaba muy liado pero con la sensación de querer probar vinos de cada una de ellas y finalmente nos encontramos con una defensa a ultranza de producto local, la mayoría de los vinos de las vinotecas, bares, restaurantes... eran de la zona más próxima que tenían.